Alfredo Thorne
Alfredo Thorne

La aceleración del crecimiento económico y la recuperación de la inversión privada ya no son las únicas premisas que figuran en la agenda de . La difusión de un audio en el que se escucha al ministro de Economía y Finanzas conversar con el contralor Edgar Alarcón sobre un tema de interés para el gobierno le ha sumado algunas preocupaciones de corte político.

En los fragmentos emitidos el último domingo por el programa “Panorama” de una reunión llevada a cabo días antes de la presentación del informe sobre la adenda del aeropuerto de Chinchero, se puede oír al titular del MEF asegurar que el presupuesto adicional que pidió para la contraloría ya había sido firmado por él, pero que faltaba “convencer al presidente”.

A pesar de que Alfredo Thorne ha descartado alguna presión política y, a la vez, ha acusado que el contralor le pidió como presupuesto adicional el 1% de lo que se gaste en la reconstrucción, varias voces opositoras a la gestión del mandatario Pedro Pablo Kuczynski ya han indicado que el caso es grave y que los protagonistas de la grabación deberían renunciar. ¿Cuánto afecta políticamente al ministro de Economía la difusión de este audio?

Para el director de Vox Populi, Luis Benavente, la situación es particularmente extraña porque no es usual ver a un titular del MEF lidiar con otros funcionarios sobre asuntos políticos del Ejecutivo.

“Es importante escuchar la totalidad del audio y hacer las investigaciones del caso. Sin embargo, de por sí habla muy mal del Gobierno que sea el ministro de Economía, un cargo que no necesariamente tiene roce político, el que dé la cara y se arriesgue, como finalmente se ha arriesgado. Él es un alfil, pero ha actuado como un caballo o, peor, como un peón”, cuestiona.

Benavente estima que Thorne no gestionó la grabación de la reunión que sostuvo con Edgar Alarcón, pero que las escuchas pasan a un segundo plano cuando se pone de manifiesto la presunción de que hubo una presión por evitar un informe desfavorable.

“Políticamente, nadie está jugando de una manera adecuada. Ni el ministro ni el contralor. Hay que tener en cuenta que en el caso del contralor el compromiso es más individual. La actuación de Alarcón no compromete necesariamente a la contraloría. Pero el caso de Thorne es distinto. Se le asocia al gobierno”, refiere.

El politólogo Arturo Maldonado afirma que el audio entre Thorne y Alarcón refuerza la imagen de que el equipo ministerial gestiona lobbies, una acusación que fue lanzada por los opositores de PPK en las campañas presidenciales del 2011 y el 2016, “y que ya se estaba olvidando”.

“Se oye que otorgaría presupuesto de la mano de un informe favorable. Mucha gente sabe que estos casos ocurren y que suelen pasar detrás de cámaras, pero que se ventilen públicamente impacta”, señala.

Del mismo modo, Maldonado calcula que, pese a que Alfredo Thorne protagoniza el audio con un personaje desprestigiado, su imagen se ha visto sumamente desfavorecida tras la difusión de la grabación.

“Ya hay una asociación negativa hacia él. Esto lo está afectando. Sabemos que los ministros de Economía no son personas carismáticas, pero Thorne sí tenía carisma. Esto lo borra del mapa”, acota.

¿Esfuerzos en vano?
El ministro de Transportes y Comunicaciones, Bruno Giuffra, informó el pasado domingo que el Ejecutivo y el consorcio Kuntur Wasi habían acordado resolver el contrato de Chinchero por mutuo disenso. Sin embargo, para Luis Benavente este anuncio se ve eclipsado por las críticas que ahora recaen sobre Thorne.

“Las cosas encontraban un aparente camino, y digo aparente porque la reparación económica que se le vaya a dar a Kuntur Wasi puede que no satisfaga a la oposición y la opinión pública. Eso estaba en debate, en análisis, pero con la aparición del audio la situación se agrava un poco más”, afirma el analista.

Por su lado, Arturo Maldonado argumenta que, dadas estas últimas complicaciones, el presidente Pedro Pablo Kuczynski tiene una alternativa de solución a corto plazo efectuando algunos movimientos en su Gabinete Ministerial antes de julio, mes en el que se acostumbra realizar estos cambios.

“Puede hacer lo que se hizo con Martín Vizcarra. Puede ‘adelantar el 28 de julio’. Se puede aprovechar la situación cambiando a Alfredo Thorne, así quita la presión sobre el MEF. Las cuestiones éticas afectan y esto aparenta ser un negociado político”, concluye.