Keiko Fujimori acusa al Gobierno por las últimas denuncias

El local partidario de Fuerza Popular (FP) ubicado en El Bucaré, La Molina, cuyo propietario es Joaquín Ramírez, fue el único lugar donde estuvo ayer la candidata Keiko Fujimori. Ella estuvo concentrada en el debate de mañana en Piura, en el que se enfrentará a su rival de Peruanos por el Kambio (PPK), Pedro Pablo Kuczynski. 

Esto, sin embargo, no fue lo único que se preparó ayer en tiendas fujimoristas contra sus adversarios en el balotaje. 

Como este Diario anunció, el Comité Ejecutivo Nacional de FP se reunió de emergencia y el resultado de este encuentro, del que también participó Keiko Fujimori, fue una conferencia de prensa por la tarde. Allí la candidata acusó a sus contrincantes de estar detrás de “una campaña de desprestigio” con “falsas acusaciones e investigaciones infundadas”, con el apoyo del gobierno de Ollanta Humala. 

“Sabemos que el combo mix electorero que apoya a mi contrincante está liderado por este gobierno y ha pasado a modo desesperación porque la señora [Nadine] Heredia está a punto de ser procesada”, señaló. 

Tras las denuncias contra el ex secretario general de su partido Joaquín Ramírez, así como las investigaciones que le siguen por el presunto delito de lavado de activos y el narcotráfico, Keiko Fujimori aseguró que quieren poner a FP la etiqueta de “narcodemocracia” y que esta intención “no tiene ningún sustento”. 

“El único que ha firmado de puño y letra con el señor [Nelson] Palomino [cocalero del Vraem] comprometiéndose a eliminar normas contra el narcotráfico es el señor Kuczynski”, agregó la candidata. 

Sobre la indagación preliminar que el fiscal Germán Juárez –el mismo que investiga al Partido Nacionalista y a Nadine Heredia– inició el 8 de marzo contra ella y su esposo Mark Vito Villanella, Keiko Fujimori aseguró que estaba “basada en denuncias periodísticas” y que tenía la “seguridad de que será desestimada”. 

“Me denuncian a mí como persona natural por temas del partido que están debidamente reportados en la ONPE con la más absoluta transparencia”, cuestionó. El ente electoral también investiga preliminarmente al partido por sus aportes de campaña. 

—Las contradicciones— 
Durante su pronunciamiento, Keiko Fujimori no se refirió a las contradicciones con el congresista Octavio Salazar, sobre declarar Lima en estado de emergencia en un eventual gobierno suyo, si continúa la ola de crímenes. El parlamentario fujimorista dijo que esta medida era un “engañamuchachos”.

Eduardo Pérez Rocha, vocero en temas de seguridad ciudadana de FP, indicó que el reelecto congresista desconocía el acuerdo que tomó su partido sobre esta propuesta porque este no asistió a la reunión del equipo técnico. 

“Salazar no ha estado presente. Estuvimos [Dardo] LópezDolz, [Marco] Miyashiro y yo. Me imagino que al no haber conocido de esto, lo toman de imprevisto”, indicó a El Comercio. “Eso ha sucedido por no haber participado de la reunión”, agregó el vocero. 

Pérez Rocha consideró que el parlamentario pudo abstenerse de responder sobre la propuesta de su partido al no estar informado de esta. “Pienso que él con abstenerse [hubiera respondido mejor]... Ha pensado que era una propuesta de PPK”.

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