Una encuesta nacional urbana de CPI, publicada hoy en el diario "Correo", arroja reveladores resultados sobre la percepción de corrupción política peruana. ¿Cuál es el partido más corrupto?, fue una de las preguntas que se incluyeron en el sondeo. La respuesta puede ser sorpresiva: El 41,4% responde que el Partido Aprista Peruano (PAP) es el más corrupto. En segundo lugar, se encuentra Perú Posible, con el 15,4%, mientras que el 11,9% considera al fujimorismo, representado por Fuerza Popular, como la agrupación política más corrupta.
A Julio Arbizu, ex procurador anticorrupción, le llama la atención que el fujimorismo se encuentre en tercer lugar en esta especie de ránking. "Esto se debe a la falta de memoria. Han pasado vario años desde que cayó la dictadura fujimorista, y mucha gente ha olvidado cuán perversa ha sido para la institucionalidad del país", indicó.
Para este abogado penalista, la imputación a Alejandro Toledo por el Caso Ecoteva, "que ha tenido mucha difusión mediática", explica ese segundo lugar que ocupa Perú Posible en la encuesta de CPI.
En opinión de la directora ejecutiva de Proética, Cecilia Blondet, también llama la atención que el partido de Luis Castañeda Lossio, Solidaridad Nacional, que tiene "tantas acusaciones sobre cuestiones irregulares", no tenga una imagen negativa: solo el 0,6% ve a este partido como el más corrupto.
¿POR QUÉ EL APRA TIENE EL PRIMER LUGAR?
Julio Arbizu sostiene que la proximidad temporal del fin del segundo gobierno aprista (2006-2011) explica en parte por qué el partido que encabeza el ex presidente Alan García es visto como el más corrupto.
Pero la razón más importante para esta percepción son los 'narcoindultos'. "Este caso ha merecido la atención de la prensa, y ha generado en el ciudadano la idea, cada vez más creciente, de que el narcotráfico ha inflitrado la política. Esto es muy potente y genera un rechazo muy intento", expresa el ex procurador anticorrupción.
También han incluido la aparición de términos como 'faenón' y 'petroaudios'. "La corrupción [en el gobierno aprista] ha sido bastante más performástica. Este tipo de expresiones y situaciones singulares se arraigan más fácilmente en el imaginario colectivo".
Para Cecilia Blondet, esta situación ha sido agravada por el actuar de Alan García frente a la megacomisión, pues el líder aprista ha recurrido al Poder Judicial para anular la investigación en su contra, pues así "baniliza" las imputaciones.
"La sensación de impunidad indigna. Y Alan García actúa como si nunca le fuera a caer la justicia y pareciera que se ufana de ello", señala Blondet.
"Es como si nos dijera: 'Acá no va a pasar nada, acá los poderosos hacen lo que quieren'. Y eso molesta mucho. Quizá esto pueda explicar por qué la opinión pública está castigando al Partido Aprista", sentencia.