Una área significativa de exploración es la integración de la Inteligencia Artificial (IA) para abordar estos desafíos. Este artículo profundiza en las formas en que la IA contribuye a la mejora de la ciberseguridad, centrándose en el papel en evolución de las identidades digitales y los desafíos planteados por los ataques impulsados por la IA.

La evolución de las identidades digitales y la confianza

La IA ayuda a mejorar y acelerar los procesos de las soluciones de verificación de identidad. Se espera que este tipo de tecnologías siga aplicándose a distintos sitios que necesitan un chequeo rápido de datos, como pueden ser los bancarios o de entretenimiento online.

Por ejemplo, en los casinos online con , este tipo de software es vital, ya que la protección de la información personal y financiera de los usuarios es una prioridad clave en la industria del juego en línea. Una verificación correcta de los jugadores mejora la experiencia de usuario y colabora con el cumplimiento de medidas regulatorias. Los casinos online necesitan garantizar este tipo de protección para con los jugadores, así pueden disfrutar de los juegos sin temer por sus datos.

La IA ayuda a los casinos en línea a proteger la información personal y financiera de los usuarios al monitorear y controlar el acceso a los datos confidenciales. Puede detectar intentos de robo de información y prevenir la filtración de datos sensibles.

El concepto de identidades digitales se ha promocionado durante mucho tiempo como una solución para mejorar la ciberseguridad. Al asociar marcadores únicos a cada individuo, como la biometría y las acciones conductuales, la idea es reducir los riesgos de autorización y autenticación. Esto supone una gran cantidad de información valiosa para reforzar sistemas de seguridad.

La IA puede ser un aliado para la ciberseguridad, pero también sirve a los hackers

Junto con el poder computacional de la IA, las capacidades de minería de datos y el acceso a vastas bases de datos, los atacantes pueden de individuos. Paradójicamente, mientras acumulamos más datos para la seguridad, aumentamos inadvertidamente nuestro perfil de riesgo digital.

Los ataques habilitados por la IA están reescribiendo las reglas de combate en la ciberseguridad. La IA tiene la capacidad de aprender y adaptarse más rápido que los adversarios humanos, lo que le permite crear ataques altamente personalizados.

Imagina campañas de spearphishing que aprovechan grandes cantidades de datos personales de redes sociales, rastreo en internet y sistemas de vigilancia pública. Estos ataques explotan las vulnerabilidades inherentes en las identidades digitales, erosionando la confianza que sustenta su eficacia.

¿Cómo se encuentra Perú en materia de ciberseguridad?

Al igual que muchos países en América Latina y el mundo, Perú se encuentra expuesto a riesgos de ciberataques. Por esta razón, resulta crucial adoptar medidas frente a esta problemática significativa, ya que puede amenazar a diversos ciudadanos peruanos. Esto se vuelve aún más urgente considerando la última tendencia delictiva en nuestro país, que ha afectado a numerosos individuos.

Para afrontar esta situación, que es esencial establecer un centro desde el cual sea posible detectar y prevenir estos incidentes de manera anticipada y coordinada.

En el país se ha implementado un Centro Nacional de Seguridad Digital. Es una entidad dependiente de la Presidencia del Consejo de Ministros que se encarga de gestionar, dirigir, coordinar y supervisar las operaciones, educación, promoción, colaboración y cooperación en materia de Seguridad Digital en el país, con el propósito de fortalecer la confianza digital.

Limitar los datos para mejorar la seguridad

Para contrarrestar la expansión de la superficie de ataque causada por la proliferación de identidades digitales, se requiere un cambio de perspectiva. Empresas como IBM sugieren a las organizaciones adoptar un enfoque multifacético que consiste en superponer distintas “capas” de prevención:

1. Enfoque de Arriba hacia Abajo (Estrategia): Enfatiza la recopilación y retención solo de datos esenciales. Desalienta la recolección excesiva de datos específicos de individuos y la minería de datos para micro-focalización. Emplea la segmentación para crear reservorios de datos más seguros.

2. Enfoque de Abajo hacia Arriba (Operaciones): Implementa la lista blanca y limita los permisos. Prioriza la reconstrucción de la confianza en la identidad al pasar de “optar por participar” a “optar por no participar” por defecto. Este enfoque reduce la superficie de ataque y minimiza la exposición de datos.

3. Enfoque en la Gestión Basada en el Riesgo (Tácticas): Reconoce que la seguridad completa es inalcanzable. Prioriza la gestión de identidad y acceso y adopta un enfoque basado en el riesgo. Concédele importancia a abordar las vulnerabilidades que representan la mayor amenaza.

Aún hay mucho por hacer

A medida que el panorama de la ciberseguridad evoluciona, el papel de la IA en la protección y el riesgo de las identidades digitales se hace cada vez más evidente. Para navegar eficazmente en este panorama, las organizaciones deben encontrar un equilibrio entre aprovechar las capacidades de la IA para la verificación de identidad y contrarrestar las amenazas impulsadas por la IA.

Mediante la adopción de un enfoque basado en el riesgo, la limitación de la proliferación de datos y el enfoque en la reconstrucción de la confianza, las organizaciones pueden crear una infraestructura de ciberseguridad más resiliente que se doble bajo presión mientras otros se quiebran. El camino a seguir implica asumir riesgos calculados en la búsqueda de una ciberseguridad mejorada en un mundo impulsado por la IA.

Contenido sugerido

Contenido GEC