Facebook y su imitación para los presidiarios en EE.UU.

"Live from Lockdown" (aproximadamente "En vivo desde el encierro") es lo más cercano que tienen los presidiarios en los Estados Unidos a una red social como Facebook.

La web contiene información sobre los prisioneros como su retrato, nombre, edad, residencia y alguna cita inspiracional, como los encontrados en redes sociales como Facebook, Google+ y LinkedIn. Sin embargo, también contiene información adicional no encontrada en otros sitios similares como periodo de encarcelamiento, crimen cometido, alias y afiliación con una pandilla.

Un artículo de Joseph Bernstein para Buzzfeed se mete en lo profundo de esta web fundada por Kamaal Bennett y conformada por solo unas decenas de usuarios. La misión del sitio es “utilizar a los líderes de las pandillas como mensajeros verosímiles  para proporcionar una visión objetiva de la vida en prisión y la dura realidad que enfrentan los miembros de pandillas tras las rejas. Un mensaje que es mejor enviado por aquellos mejor equipados para hablar con la juventud de una manera que lo dicho sea recibido, creído y aceptado”.

Llamar a “Live from Lockdown” una red social como Facebook es faltar un poco a la verdad. Como es lógico, los prisioneros no tienen legalmente un acceso al Internet que puedan usar para actualizar sus perfiles. En cambio, los presidiarios utilizan los métodos de comunicación reglamentados por las prisiones para hacerle llegar la información a Bennett, que utiliza la página como un trabajo secundario, quien la transcribe por su cuenta al sitio web. Este devuelve a los presidiarios capturas de la página para demostrar que la información ha sido publicada o para que lean las respuestas.

Entre los casos más interesantes está el de Jacqueline Nugent y Roderick Sutton, quienes volvieron a contactarse luego de ocho años por la red social. Si bien las conversaciones que tuvieron no llevaron a una reconciliación, estas permitieron un mayor entendimiento y reflexión sobre las circunstancias que llevaron a Sutton a la cárcel, ciertamente relacionadas a ser el líder de una banda criminal.

“Recientemente recibí una carta que hizo que entendiera las cosas más claramente. También me mostró cuánto esta persona tuvo un efecto tan profundo en mi vida. He llegado a entender que la justificación es una manera de vivir en nuestra cultura. ¡Algo pasará y nosotros pasaremos interminables días, meses, incluso años justificando por qué eso estuvo bien o mal! Entiende que tú estás actualmente actuando más como el generador de problemas que como su solucionador. Entiende, ¿cómo podemos reconciliarnos si uno está intentando superar al otro tirándole acusaciones a la cara para afectarlo emocionalmente y humillarlo?”, escribió.

Otras correspondencias posteriores permitieron a Sutton contactar con su hija, con quien no había tenido contacto en más de 12 años.

“Nosotros los ‘padres’ encarcelados  somos meramente fantasmas. ¡No soy la excepción! Somos el origen de nuestra propia destrucción (…) por estar inmersos en la ‘vida callejera’ y tener ‘calle’. No hay muchos que admitirán extrañar a sus hijos porque eso no es ‘ser duro’ en prisión”, lamentó.