Cuando nuestro presupuesto se transforma en digital

Este podría ser un artículo sobre el dinero digital, sobre bitcoins o sobre transacciones hechas usando nuestros celulares como billeteras. Sin embargo, nos vamos a concentrar en algo más cercano con nuestra realidad: el nuevo presupuesto digital.

Tal como lo hicieron nuestros padres, los jóvenes adultos peruanos (y de todo el mundo) siguen preocupándose por cosas como el pago de la cuota del departamento y del mantenimiento. Sin embargo, hay muchos otros puntos dentro del presupuesto que han ido cambiando con el paso de los años. 
 
EL CONTROL ES MÍO

Aún se tiene en la mira el televisor más moderno y más grande que el bolsillo pueda pagar. ¿Pero para qué se usará? ¿Vale la pena pagar un paquete de televisión de pago si la mayoría del tiempo no están en casa? 

La alternativa son los servicios de streaming como Netflix, que cobra desde US$8 al mes por acceder a un gran catálogo de películas y series. Hay otras opciones gratuitas como Crackle, las apps de los canales de televisión (algunas permiten ver programas completos) o inclusive usar YouTube.

 
MÚSICA EN TODOS LADOS

¿Sabes por qué se han puesto de moda los microcomponentes, los parlantes en torre o los pequeños parlantes portátiles con conectividad inalámbrica? 

Primero, porque los departamentos cada vez son más pequeños y aparatos muy grandes, incomodan. Segundo, con equipos más compactos se pueden llenar eficientemente los espacios. Tercero, ya ni siquiera hay que contar con una discografía física para armar la fiesta. 

Desde que existen servicios como Spotify, Apple Music, Google Music, entre varios más. Todos ofrecen servicios gratuitos (por tiempo limitado o a cambio de escuchar publicidad entre canciones).

Pero si prefieres, por un pago mínimo (que va desde los S/.16 al mes) puedes acceder a los servicios Premium que permiten desde omitir la publicidad hasta crear tus propias listas de reproducción para escuchar tus canciones sin consumir tu plan de datos móviles.  
 
ENTRETENIMIENTO Y MOVILIDAD

Una de las actividades más comunes entre los jóvenes es ir al cine.  Hasta hace poco el ritual era el mismo de toda la vida: mirar en el periódico la cartelera, llegar al local, hacer la cola, comprar las entradas, hacer otra cola para comprar en la confitería y luego esperar que haya algún sitio de nuestra preferencia en la sala. 

Ahora existen aplicaciones (como Cinepapaya o la desarrollada por la cadena Cineplanet), que agilizan todo el proceso. Se abre la aplicación, se elige la película según el día y el horario, se eligen los asientos y se procede a pagar (con cargo a la tarjeta). Nada más. Sin necesidad de hacer colas, solo debes presentar tu móvil con la confirmación de la compra y listo. 

Además, como las salas están numeradas tienes tu posición preferida asegurada. Los servicios de este tipo incluyen además promociones, que ofrecen entradas más baratas en determinados días y horarios.

Pero si eres de los que está aburrido de esperar por un taxi que te quiera llevar a tu destino en cualquier momento, ahora tienes una gran cantidad de aplicaciones de taxis a tu disposición. Hay servicios que cobran las carreras basándose en cuadrantes y otros usan taxímetros. 

En todos los casos el contacto se hace vía una app móvil, con mapas GPS para saber la posición exacta del conductor y se puede pagar tanto en efectivo como con cargo a la tarjeta (de crédito o débito).
 
LA BASE DE TODO

Pero para tener una “vida digital” es necesario tener una conexión a Internet. Al igual que el servicio de televisión de pago ¿es recomendable pagar por una conexión fija en casa cuando es el lugar en donde menos se está durante todo el día? Para quienes respondieron que no, también hay varias opciones. 

Si lo que necesitas en conexión móvil, probablemente lo que necesites sea lo que te ofrece tu operador de telefonía. Existen diversos planes 3G y 4G  ajustados para cada necesidad. Pero si lo que necesitas es una conexión de mayor velocidad y que te permita tener más dispositivos conectados, servicios especializados como el de OLO o los que te ofrecen algunos operadores de telefonía, pueden ser la solución.