Un grupo de investigadores de la Universidad de Yale descubrió que la capacidad cognitiva de los chimpancés, con quienes compartimos el 98% de nuestro ADN, les permite cocinar, según un estudio publicado en la revista Proceedings of the Royal Society B.
En un experimento realizado con un grupo de primates del Santuario de Chimpancés Tchimpounga del Instituto Jane Goodall en la República del Congo (África), los científicos demostraron que los primates preferían una batata (camote) cocinada antes que una cruda, evidenciando que no les importaba esperar unos minutos hasta que el alimento estuviese cocido.
Además, descubrieron que los chimpancés también comprendían la transformación de los alimentos crudos a cocidos. En la prueba, dispusieron delante de los primates dos dispositivos: uno para cocer los alimentos y otro de control que dejaba la comida cruda. Al dejar a los primates elegir cuál de ellos preferían para obtener su comida, todos ellos optaron por el dispositivo que cocinaba el alimento.
Por último, en la fase del experimento relativa a la capacidad para cocinar, tras entregar a los chimpancés batatas crudas y el dispositivo para cocinar, dejaron solos a los chimpancés para ver qué ocurría. Al año siguiente, los científicos volvieron al santuario de chimpancés y realizaron un nuevo experimento entregándoles alimentos crudos, trozos de madera y el dispositivo de cocción, esta vez colocado a cuatro metros de distancia de los alimentos. El resultado fue palpable: los primates introdujeron los alimentos crudos en el dispositivo de cocción pero no los trozos de madera y esperaron tres minutos para coger los alimentos ya cocinados.
Otra de las conclusiones más significativas fue que aunque tuvieran delante el dispositivo para cocinar, algunos guardaron los trozos de alimento crudo para cocinarlos más tarde, lo que evidencia su capacidad para planificar el futuro, informaron los investigadores.
“Si nuestro pariente evolutivo más cercano posee estas habilidades, sugiere que una vez que los primeros seres humanos fueron capaces de utilizar y controlar el fuego también podrían utilizarlo para cocinar”, explica Felix Warneken, coautor del estudio.
Fuente: Muyinteresante.com