Con la cantidad de equipos portátiles de sonido disponibles en el mercado, posiblemente el simple y clásico SRF-39FP de Sony no sería, ni de lejos, una de sus opciones. Sin embargo, un reciente informe de “The New Yorker” sobre el uso de la radio en las prisiones de EE.UU. señala que ese modelo es el más requerido.
¿Y qué hace tan atractivo a este equipo, con una antena simple hecha de alambre de cobre y ferrita, y circuitos de AM/FM?
Las razones son muchas. Desde el punto de vista del diseño, es un equipo amigable para las autoridades pues su cuerpo es de plástico transparente. Así, se puede prevenir su uso para esconder contrabando. De otro lado, cuesta menos de US$30, una cantidad razonable para un aparato electrónico en tiendas dentro de las prisiones.
Sin embargo, la principal razón de su popularidad sería su autonomía. Solo necesita una batería AA para ofrecer hasta 40 horas de funcionamiento continuado. Mucho más que los reproductores digitales más modernos.
“Los internos federales se han adaptado bien a la vida de la batería, pues ellos solo pueden gastar US$320 al mes en el economato. Si gastan más dinero en pilas significa menos para los snacks, papelería, ropa y artículos de aseo”, señala la nota.