Las autoridades australianas evaluaban este domingo los “daños considerables” provocados por los incendios forestales al día siguiente de una jornada catastrófica en la que el número de muertos subió a 24. También habría muerto al menos la mitad de la población de koalas en Australia, que no sufre una mortífera enfermedad y que es clave para “asegurar” el futuro de la especie. [Fuente: AFP]