Bonus Track #2: A 43 años de la muerte de Nino Bravo

Luis Manuel Ferri Llopis dejó este mundo un día como hoy, 16 de abril, cuando apenas tenía 28 años y su carrera se encontraba en todo su apogeo. El destino quiso que una de las voces más poderosas de la música en español no viera los frutos de su trabajo. Ahora tendría 71 años, y aquí haremos un repaso por su historia musical. Señoras y señores, con ustedes Nino Bravo.

Sirva este primer video para mostrar la calidad vocal que poseía Nino Bravo, a quien vemos acá en una presentación de 1971 en Montreux (Suiza), con la canción Puerta de amor. Nacido en un pequeño pueblo de Valencia (España) en 1944, Nino Bravo era, en realidad, “Manolo” para sus amigos y familiares. ¿Cómo así surgió su nombre artístico?

La idea fue de su primer mánager, Miguel Siurán, a quien se le ocurrió primero lo de “Nino”. Como lo cuenta Siurán, el nombre surgió por la admiración que este sentía por el compositor italiano Giovanni “Nino” Rota, quien -entre otras grandes joyas- es el autor de la banda sonora de El Padrino I y II. Lo curioso es que “Nino” era también el apodo que en Valencia se le daba a alguien de cuerpo bien formado y guapo.

Lo de “Bravo” llegaría días después. Era una noche de julio de 1968 y, en una taberna, Siurán fue testigo de una discusión entre un grupo de marineros y una prostituta. Uno de ellos salió en defensa de la mujer y fue entonces cuando Siurán exclamó: “¡Bravo, Nino!” (recuérdese el significado de “Nino” en Valencia). Y pensó que sonaba muy bien que un cantante se llamara Nino Bravo. Pero a ese cantante, la idea no le gustó. “En principio, Nino (o Manolo) puso reparos porque le sonaba a torero, pero a mí me sonaba a gloria”, ha dicho Siurán. Al final, Nino Bravo aceptó ese nombre a regañadientes.

Su primer sencillo, lanzado en 1969, presentó el tema Es el viento, que hoy sigue sonando en las radios, pero que no tuvo un buen recibimiento por parte del público. De hecho, apenas se vendieron 600 copias de dicho disco.

En junio de 1970, Nino Bravo sacó otro clásico, Te quiero, te quiero, el cual inicialmente había sido escrito para “La Faraona” Lola Flores. La gran interpretación de Nino Bravo le hizo merecedor de su primer disco de oro. “La grabé y no faltó quien dijo que aquello era una cursilada y que no debía salir. Incluso, casi se negaron a hacer promoción de la canción”, dijo el propio Nino Bravo en una entrevista. Escuchémosla en este videoclip grabado en Madrid, muy probablemente en el Paseo del Prado.

Un dato interesante es que Te quiero, te quiero fue la canción que usó Nino Bravo para pedirle matrimonio a su novia María Amparo Martínez Gil. Él le regaló el disco 45 de la canción con un texto que decía: “Para Mary, mi único y verdadero amor, con propuesta de matrimonio. ¿Sí o no?”. Al otro lado del disco, ella escribió con letras grandes: “SÍ”.

Ese año de 1970, Nino Bravo lanzó la canción con la que empezamos esta historia: Puerta de amor, cuya adaptación fue hecha por el bajista de su conjunto, Vicente López, aunque, como dice el sitio web NinoBravo.net, la cuidada instrumentación y la calidad interpretativa de Nino Bravo no bastaron para repetir el éxito de Te quiero, te quiero, que a finales de 1970 aún seguía vendiendo más discos que el nuevo single.

Pero, ¿cuál es la versión original de Puerta de amor?

Aquí tenemos al estadounidense Gene Pitney con la canción A street called Hope (Una calle llamada Esperanza), de marzo de 1970 y que no tuvo mucho éxito en las listas de clasificación. Esta versión original habla de alguien sumido en la tristeza quien tiene un extraño sueño: sueña con una calle llamada Esperanza, ubicada en un pueblo llamado Libertad, donde cada reloj apunta a la hora del amor.

Pero Nino Bravo apuntaba a lo más alto. Entre sus artistas favoritos figuraban Joan Manuel Serrat, cuya música siempre escuchaba en el auto, así como el argentino Alberto Cortez, el inglés Tom Jones y el italiano Domenico Modugno (de quien hablaremos en otro momento).

A mediados de 1971 aparece uno de los hitos en su carrera: Noelia, canción que se convirtió casi al instante en número uno. Incluso, se comenta que Nino Bravo tuvo que alejarse del micrófono a una considerable distancia para cantar la parte final (la del grito “Noelia”), pues había el riesgo de que la grabación se distorsionara. Escuchémosla en vivo.

En noviembre de 1972 se presentó el álbum “Mi tierra“, el cual incluyó otro de sus grandes temas: Libre, el cual encierra un profundo significado. Como recuerda el diario español El Economista, Libre está dedicado al obrero alemán Peter Fechter, quien a los 18 años se convirtió en la primera víctima del Muro de Berlín. (“Tiene casi 20 años y ya está cansado de soñar, pero tras la frontera está su hogar, su mundo y su ciudad”).

En agosto de 1962, Fechter intentó escalar el muro y escapar de la Alemania del Este, pero terminó siendo disparado por los guardias. El joven se desangraba en el muro y pedía auxilio, pero nadie lo ayudó por temor a las consecuencias que podrían desatarse. Al final, los ciudadanos de ambos lados lo vieron agonizar durante casi una hora, en una de las escenas más indignantes de la Guerra Fría. (“Y tendido en el suelo se quedó sonriendo y sin hablar”) Ahora escuchemos Libre y prestemos más atención a su letra.

En la mañana del 16 de abril de 1973, Nino Bravo tomó el volante de su recién adquirido automóvil y partió de Valencia rumbo a Madrid. Lo acompañaban tres personas, entre ellos los integrantes del dúo Humo, pues Nino Bravo iba a producirles su primer disco. Desgraciadamente, en una curva a la altura de Villarrubio (Cuenca), el coche se salió de la carretera, dio varias vueltas de campana y se llevó la vida del notable cantante valenciano.

Nino Bravo dejaba a una hija de apenas un año y medio y a una esposa que estaba embarazada. “Yo tenía 21 años y se me fue el mundo a los pies, lo perdí todo”, dijo María Amparo Martínez, la esposa de Nino Bravo, en una entrevista radial. Atrás también quedarían los proyectos de Nino Bravo de realizar una gira por América Latina para junio de aquel 1973 y de viajar a Tokio para promocionar sus discos en Asia.

Así que para recordar los 43 años de su partida, terminemos esta historia con aquella canción que habla de despedidas, ligeros equipajes y largos viajes: Un beso y una flor, en imágenes filmadas en Palma de Mallorca (España) y que son el único video a color de este gran artista. Tratándose de Nino Bravo… lo que nos es querido, nunca queda atrás.

Hasta la próxima canción.