Trabajé casi cuarenta años en la redacción de El Comercio y la mitad de ese tiempo tuve la dicha de ser la guardiana, junto con un increíble equipo, de los acervos documentales más completos del periodismo latinoamericano. El historiador Héctor López Martínez señala que la información que allí se conserva es útil para los cultores de las más variadas disciplinas. Casi no existe un texto grande o pequeño de la vida nacional o mundial que no esté registrado, desde el 4 de mayo de 1839, en las páginas de El Comercio.
Con el propósito de preservar las páginas del decano, hace ya mucho tiempo que se procedió a microfilmarlas. Era una ayuda para los investigadores, pero tenía limitaciones de variada índole. Ahora, hemos dado otro gran paso de la mano con la tecnología, digitalizar todas las ediciones de El Comercio. Hasta la fecha se han digitalizado 589.440 páginas que comprenden los años 1839 a 1966.
La digitalización nos permite redescubrir noticias de gran importancia histórica y cultural como la Guerra con Chile, los avances científicos, los descubrimientos arqueológicos, como el de la Fortaleza de Kuélap, ocurrido en 1843, y que hoy ha vuelto a ser noticia. La digitalización es una tarea compleja y delicada debido a la fragilidad de los tomos y sus páginas.
Además, hemos encontrado suplementos insertados en las ediciones que han sido empastados de manera que el correlativo de las páginas no coinciden con la secuencia lógica numérica. En este caso se utiliza un aplicativo que permite: recortar, girar, renombrar y compaginar. A fines de este año, El Comercio estará digitalizado desde 1839 hacia adelante. Algunos querrán guardar noticias de carácter familiar y personal, otros buscarán asuntos políticos, comerciales, de las áreas de humanidades, científicas o deportivas. Un sueño hecho realidad.
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