La dieta vegana y las oraciones no curan el cáncer
“A las nueve de la mañana, me llamaron del hospital donde me hice una radiografía de pecho. Me dijeron que tenía fluidos en los pulmones”. Era el 17 de setiembre de 2015 cuando a Mari Lopez le dieron esta noticia. Fue inmediatamente al hospital y le hicieron unas pruebas adicionales. Esa misma noche, a las 10:45, el doctor le dijo: “Señorita Mari. Lo siento mucho. Usted tiene cáncer en estadio cuatro”.
Mari decidió mudarse con su hermana Sarah. Le contó las malas noticias a su cliente Tommy quien le dijo que, para alejar el cáncer de su cuerpo, lo debía mantener “oxigenado” y esto lo lograría con una dieta basada en vegetales. Por otro lado, sus amigos de la iglesia, le recomendaron tomar agua alcalina. Además, según leyó en internet, debía eliminar de su vida los alimentos “ácidos” como las pizzas, las hamburguesas, el alcohol y el azúcar.
Desde entonces, Mari pasó a tener una dieta basada en ensaladas y extractos de frutas y verduras, especialmente, uno llamado “explosión de limón y jengibre” inventado por el “sanador holístico” Lou Corona, al que le atribuía increíbles efectos terapéuticos. “No tengo nada que perder”, se decía Mari. A esto le sumaba muchas plegarias pues ella era una persona muy cristiana.
A los 30 días de haber cambiado sus hábitos alimenticios, bajó de peso pero se sentía mucho mejor, aunque la tos persistía. Para enero de 2016, la tos había desaparecido. “En 90 días volví a la normalidad”, relata Mari. Según ella, ese es el tiempo que tarda la sangre para “regenerarse”. “El hígado, cada cinco meses. Los pulmones, cada ocho días”, añade.
El 17 de febrero de 2016, Mari vuelve a ver al médico y, según ella, ya no “le pudieron encontrar cáncer en su sangre”. “Sabía que había sido sanada gracias a las frutas y verduras”, comenta.
Junto a su sobrina Liz, decide contar su increíble historia de cómo se curó del cáncer gracias a la dieta vegana y las oraciones. Para ello, en junio de 2016, abren un canal de YouTube llamado Liz & Mari. Precisamente este relato que acabo de escribir es un resumen de su primer video:
En un segundo video enseña como preparar el “asesino del cáncer” que es nada menos que la “explosión de limón y jengibre”. En un tercer video habla sobre otros remedios naturales para diversos problemas [aunque presenta un descargo de responsabilidad (medical disclaimer) en los primeros segundos]. En el cuarto video presenta un testimonio de otra persona sanada gracias al poder de dios y la dieta vegana.
Para este momento Liz & Mari ya habían ganado mucha popularidad, así que en un quinto video publicado en enero de 2017, Mari decide responder preguntas de sus seguidores. Después de unos días conversa con dos invitados sobre el mismo tema.
Sin lugar a dudas, se la veía muy bien. Llena de energía y vitalidad. ¿Acaso Mari había logrado vencer un cáncer terminal gracias a la dieta vegana y las oraciones? Sin embargo, ya no volvieron a aparecer más videos durante las siguientes semanas. Sorpresivamente, el 1 de octubre de 2017, Liz aparece sola frente a cámaras para anunciar que el cáncer de Mari había regresado. “Ella ha estado en el hospital. Ha empezado a sentir mucho dolor en sus huesos. No tiene apetito”.
El cáncer de Mari se había diseminado por todo su cuerpo y le apareció un tumor detrás del ojo. Fue en ese momento en que decidió someterse a una radioterapia con lo que pudo recuperar la visión. Sin embargo, los problemas para respirar se hicieron más frecuentes debido a los fluidos que se acumulaban en sus pulmones. “Ella se está sintiendo muy débil y ya no puede caminar”, relata Liz en el video.
Una nueva visita al hospital reveló que el cáncer también se había diseminado al hígado y los pulmones. “Si ustedes me preguntan ¿como pasó esto? ¿Por qué [el cáncer] volvió? Realmente no tengo respuestas para ello”, sentencia Liz. “Solo Dios sabe lo que está pasando”.
Hoy en todos los videos —cuyos comentarios fueron eliminados y desactivados— aparece el siguiente mensaje:
“Mi tía Mari falleció debido al regreso de su cáncer desde la creación de este video. Por favor mira mi video más reciente para una actualización completa. Como una forma de respeto hacia mi familia, solicito amablemente que se guarden todos los comentarios negativos e irrespetuosos“.
De acuerdo con el último video publicado por Liz el pasado 18 de febrero, Mari murió en diciembre. Veintisiete meses después de que le dijeron que tenía cáncer de seno en fase muy avanzada. Aunque la recaída e internamiento en el hospital se dio antes de los dos años de haber sido diagnosticada.
Para muchos, Mari vivió 27 meses con un cáncer terminal gracias a la dieta vegana y las oraciones. Sin embargo, de acuerdo con la Asociación Americana de Cáncer, la esperanza de vida promedio —siempre y cuando sea tratado correctamente— es de tres años y el 22% de las pacientes vive hasta cinco años. Esto es mucho más de lo que sobrevivió Mari.
Puede resultar crudo, pero estos videos muestran de manera explícita que los tratamientos alternativos contra el cáncer no funcionan. Además, pueden resultar peligrosos si las personas prefieren optar por estos dejando de lado las recomendaciones basadas en evidencias de los oncólogos.
Lamentablemente, el cáncer es una enfermedad desgraciada. Los tratamientos (quimio, inmuno o radioterapia) no siempre son eficaces, más aún cuando se encuentra en un estadio avanzado. Sin embargo, son las mejores armas que tenemos por ahora. Han demostrado que funcionan mejor que un placebo como lo son la homeopatía, la magnetoterapia, la acupuntura, el biomagnetismo y otras terapias alternativas que pregonan curar esta enfermedad sin dolor ni efectos secundarios.
Los charlatanes abundan por todos lados. Y hasta las personas más inteligentes y racionales pueden caer en sus engaños. Steve Jobs es un claro ejemplo. Le diagnosticaron un tipo de cáncer de páncreas raro pero poco agresivo. Sin embargo, en vez de seguir el tratamiento recomendado por sus doctores, Jobs optó por una dieta similar a la de Mari, recomendado por su espiritista. Cuando su salud empeoró quizo optar por el tratamiento convencional pero ya era demasiado tarde. De todas maneras le extirparon el tumor pero ya había hecho metástasis al hígado. Cinco años después, muere.
Sinceramente, es muy triste ver morir a alguien por una enfermedad que pudo haber sido tratada y hasta curada.