Concierto de Mortem - La legendaria banda peruana encabeza el contraataque del metal nacional

El Aquelarre de Goya, portada de la primera edición de su disco debut Demon Tales, ilustra el afiche del show.

Mortem es, hasta ahora, el gran legado del Perú al metal mundial. Sin desconocer el trabajo de nadie, no es cuestionable que la banda formada por los hermanos Cerrón Palomino en Pueblo Libre, distrito tradicional de la clase media Limeña, en 1986, en medio de un Perú fracturado y convulsionado, es el referente preclaro que ha dado el metal en nuestras tierras. Por ello, cada una de sus presentaciones es un acontecimiento, máxime cuando no actúan en nuestros escenarios, en condiciones aceptables, desde aquella noche en la que abrieron para Slayer en el estadio de San Marcos, hace ya unos tres años (como pasa el tiempo).

No pretendo realizar una apología a Mortem, pues sus méritos no son discutibles, pero es necesario recordar la enorme persistencia y continuidad de la banda, que en realidad ha estado en actividad por más de 25 años; ha editado 4 discos, todos en sellos extranjeros (Merciless Records, Iron Pegasus); fue la primera banda peruana de metal en realizar giras en Europa y los Estados Unidos, con el mérito agregado que su público no lo constituye la colonia peruana, como pasa con casi todos los demás artistas comerciales de nuestro país, sino público headbanger local; haber tocado en shows con Inmolation, Destruction, Kreator y Slayer en Perú y en el extranjero en las giras europeas con Slugathor, Kataplexia, Repugnant, Pentacle, Pulmonary y Abscess, todas bandas renombradas en el under metálico. Pero sobre todo, no habrían logrado todo esto de no ser que supieron desde el principio ser honestos y ambiciosos con su propuesta de metal extremo y abiertamente satanista fuertemente arraigada en la herencia del primer Slayer, Possessed, Sacrifice, Venom y Death, entre otros, pero a la vez traducida a un lenguaje sonoro singular. Mortem tiene una voz propia en el metal, que es inconfundible. Todo esto los ha colocado en el pináculo de la historia musical del metal peruano.

Al parecer, he realizado lo que dije que no haría: una apología a Mortem, pero es que es imposible ser headbanger y peruano y no sentir orgullo cuando se oye alguna de sus producciones, en particular los discos o cuando reconoce el empeño que sus integrantes siguen poniendo en la continuidad, o quizás persistencia, de esta historia. Todos los salves que sean necesarios para Mortem y su blasfemo, anticristiano y auténtico metal.

Pero ellos no son el único atractivo de esa noche. También tocará una representativa turba brutal de su época constituida por Desarme, la banda hardcore favorita de todos los metaleros; Hadez, sus compañeros de generación; y Mortala, un grupo que se remonta a inicios de los 90, pero con los que compartió shows en esos convulsos y hermosos años. A ellos se les suma la que es sin lugar a dudas la banda peruana de más éxito de la nueva generación, los heavymetaleros de Cobra, que vienen de un poderoso show en Chile junto a Satan y Bulldozer y que participarán en el próximo Keep It True 2015 en Alemania, al lado de Riot, Exciter, At War y Shock Paris, entre otros.

Es decir, este es el show metalero nacional del año. Una cita imperdible para todo aquel que se autodenomina o reconoce como headbanger y, en todo caso, incluso para todo aquel que presume de conocer el panorama del rock nacional. La entrada no está nada cara, unos 30 soles que creo que la mayoría de nosotros puede pagar sin mayor problema. Nos vemos allá. Apoya a tu escena. El metal es (contra)cultura.

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Esperamos algo así, o mejor

Cobra en Chile

Mortala, del recuerdo