El retorno del Rey
El Rey ha vuelto a su casa. Las bocinas de los autos han sonado en todo Cleveland al confirmarse de que el hijo prodigo, por fin, ha regresado a la ciudad que lo vio nacer y erigirse como estrella. LeBron no estaba harto de Miami ni tampoco estaba peleado con los dirigentes del Heat –Pat Riley- como muchos fanáticos creían, sino todo lo contrario. Su misión había terminado ahí, dos títulos y cuatro finales daban muestra de lo mucho que dio LeBron en el estado de Florida. Ahora, y en un nivel de extraterrestre, de Space Jam podría decirse, el ‘Rey’ ha decidido regresar a Cleveland, una ciudad en la que desea ver crecer a su familia y a la cual quiere darle un título.
En un acto más de compromiso y amor, como lo tienen futbolistas como Verón en Estudiantes de La Plata, Riquelme en Boca Juniors, ‘Chemo’ Del Solar en la ‘U,’ y un sinnúmero de casos más, LeBron ha sacrificado la gloria por el pueblo recóndito, el que no tiene tantos millones de dólares, pero sí tiene historia para James. Ahí fue donde nació, donde madre hizo lo imposible para que crezca saludable y alejado de las drogas. Ahí fue donde hizo sus primeros amigos, ahí empezó a confiar en la gente, en una persona que fue casi como su padre y ahí se hizo basquetbolista profesional. Para LeBron, no se trata de un contrato millonario (se habla de 94 millones por cuatro o cinco temporadas), se trata de un acto de cariño y lealtad para millones de personas que confían en él para hacer de Cleveland, la nueva tierra para el básquet.
“Cuando dejé Cleveland, estaba en mi misión. Buscaba títulos y gané dos. Pero Miami ya conoce esa sensación y nuestra no lo siente hace mucho tiempo. Mi meta sigue siendo la de ganar más trofeos, pero más importante para mí es darle uno al Noreste de Ohio. Yo siento que puedo significar más para Cleveland que para Miami. Quiero que los niños vean que en Ohio no hay mejor lugar para crecer y salir adelante”, dijo entre varias cosas LeBron en una columna para explicarle su decisión a sus millones de seguidores.
No ha sido Houston ni tampoco el glamour de los Lakers, LeBron ha demostrado que más importante son las raíces que los millones. Hoy el ‘Rey’ tiene la misión de convertir a Kyrie Irving en uno de los mejores bases de la NBA y a Andrew Wiggins, elegido el número uno del Draft por parte de Cleveland, en uno jugador al nivel de él. Probablemente LeBron pase a otra posición, como la de ala pívot, para potenciar a un equipo que ha logrado formar un ‘Big Three’. Y así como Michael Jordan tras el partido de la fiebre de los 90, o los 81 puntos de Kobe Bryant en un solo partido, quizás esta decisión que ha tomado LeBron pueda convertirse en una de las historias más emblemáticas del básquet. ‘King’ James le ha dicho a la NBA que el dinero de Miami no vale tanto como sí lo es su natal Cleveland. Miami le ofrecía 127 millones y él ha dicho que no.