El mototaxi solar peruano
La conservación del medio ambiente ha sido la preocupación más importante del Dr. Werner Pacheco Luján, docente e investigador de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos (UNMSM), en la Facultad de Ingeniería Electrónica y Eléctrica (FIEE), quien ha construido el primer mototaxi solar del país, el cual podría también utilizar baterías o pedales.
Los mototaxis son vehículos que se usan con bastante frecuencia en diversas regiones del Perú, incluida la capital, pero son también unidades altamente contaminantes debido a las características de su motor y el combustible que utiliza. Por esta razón, Pacheco ha visto la necesidad de realizarle algunas modificaciones para eliminar la emisión de dióxido de carbono que daña el medio ambiente y reducir la contaminación sonora que provoca debido al bullicio de sus motores.
¿CÓMO FUNCIONA?
Este vehículo funciona principalmente con energía solar gracias a varios paneles que se encuentran acoplados al techo de la carrocería y que están conectados directamente al motor, pero a su vez la energía recolectada sirve para recargar unas baterías que permiten al conductor tener la opción de usar energía eléctrica en los días que no haya sol o incluso en la noche.
Es importante mencionar que cada una de estas fuentes de poder trabaja por separado. “Es más eficiente porque cada una es independiente; cuando hay sol, funcionan los paneles solares, pero cuando está nublado, solo funciona la batería”, mencionó Pacheco a El Comercio.
El investigador calcula que el vehículo puede alcanzar una velocidad de 50 kilómetros por hora y que la vida útil de las baterías es de tres a cinco años, proporcionándole al motor energía suficiente para recorrer 120 kilómetros en promedio de autonomía (antes de requerir ser cargada).
Como se sabe, Lima es una ciudad en la que la mayoría de los días está nublada, por eso se piensa modificar las baterías para que también puedan ser recargadas con hidrógeno, lo que permitirá tener energía limpia y más barata que el combustible con hidrocarburos.
SIN INVERSIONISTAS
En un principio el proyecto contó con la ayuda de la empresa sueca Skyllermarks, dedicada a realizar proyectos sobre la conservación del medio ambiente, que se encargó de proporcionar los paneles solares del mototaxi. Pero, según asegura el doctor Pacheco, la empresa no pudo seguir ayudándolo debido a la crisis económica.
“Este proyecto me tomó más de cuatro años llevarlo a cabo, porque no he recibido apoyo económico, lo he avanzado solo”, dijo el investigador y recalcó que no ha tenido ninguna ayuda financiera de entidades privadas o públicas para el desarrollo de este prototipo.
Por ahora, el doctor Pacheco y su equipo constituido por estudiantes se están enfocando en conseguir la patente de este nuevo modelo. Considera que la patente es la razón por la cual no consigue interesar a otros inversionistas.
“Los empresarios se desaniman cuando ven que la patente es de [la Universidad Nacional Mayor de] San Marcos, ya que eso los obliga a pagar un porcentaje por los derechos”, agregó el investigador, que necesita ayuda financiera para terminar este modelo de mototaxi.