Con videojuegos enseñan biología celular a escolares
La demanda de los videojuegos en el mundo por parte de niños, jóvenes y hasta adultos no cesa. A diario aparecen nuevas versiones y retos que cautivan a sus seguidores. Pero, ¿qué pasaría si uno de estos medios de entretenimiento es trasladado a la educación? Esta última pregunta fue resuelta por un equipo de investigadores de Chile y Argentina que apelaron al conocimiento y, sobre todo, a la creatividad para poner en marcha un proyecto denominado Kokori, un videojuego en tres dimensiones con el cual se aprende sobre biología celular. Si quieres saber más sobre este tema desarrollado por Sandro Medina, sigue leyendo.
“Nuestra preocupación por elevar la enseñanza de la biología, una materia abstracta y a veces complicada de entenderla, nos llevó a presentar este trabajo que ha sido bien recibido no solo por los alumnos del primer año de secundaria, nuestro principal público objetivo, por cierto, sino incluso por estudiantes universitarios”, explicó a El Comercio Mariela Szwarcberg Bracchitta, bióloga argentina y miembro del equipo creador de este videojuego.
¿CÓMO SE JUEGA?
El juego es gratuito y ya lleva más de cinco mil descargas. Tiene como propósito principal resolver problemas que se presentan en una célula animal. “El usuario usa nanobots con los cuales navegan al interior de una célula y realizar distintas funciones de reconstrucción, reparación y rescate”, señaló Szwarcberg.
En total existen siete misiones cortas con temáticas diferentes que se deben resolver con mucha habilidad y conocimiento. “Fue lanzado en el 2009, y desde entonces tenemos respuestas alentadoras de parte de estudiantes y profesores. Apelar a las tecnologías de la información para la enseñanza ha sido una buena decisión, motivo por el cual el proyecto no quedará aquí”, expresó el argentino Eduardo Mercovich, miembro también de este equipo de investigadores.
Los puntajes que se consiguen con este videojuego se comparten en la red social Facebook. “Este detalle adicional que tiene Kokori fue más bien una sugerencia hecha por los propios usuarios. Hay un ‘feedback’ increíble con las audiencias que nos permiten mejorar este proyecto, motivo por el cual también presentaremos un manual dirigido a los docentes para que se identifiquen y conozcan a fondo este trabajo”, anotó la especialista argentina.
Opción que no tiene pierde
La segunda versión de Kokori –que en lengua rapanui significa juego colectivo– será multiplataforma, es decir, para “que corra en todos los sistemas operativos y sea también multijugador”, mencionó a este Diario Eduardo Mercovich, el otro creador del proyecto.
Esta iniciativa tecnológica educativa que agrupó a profesionales de Chile y Argentina y que es dirigida por Virginia Garreton, tiene como centro de operaciones la Universidad Santo Tomás, ubicada en Santiago. Fue financiada por el Fondo de Fomento al Desarrollo Científico y Tecnológico de Chile.
“No tienen pierde con este videojuego en 3D. Los profesores y estudiantes estrecharán mayor vínculo, pues la suma de la tecnología y el conocimiento hacen posible que materias consideradas frías y a veces complicadas se conviertan en algo entretenido y principalmente despierten el interés por el aprendizaje de los alumnos”, sostuvo.