1 / 10 Una habitación con tonos neutros siempre nos va a dar la impresión de amplitud. La composición de cuadros funciona como cabecera y las lámparas colgantes añaden una cuota cool y romántica. (Foto: Shutterstock)
2 / 10 Una iluminación en clave cálida es una buena forma de darle un ambiente íntimo a la habitación. Puedes colocar luces amarillas, a diferentes alturas. (Foto: @apartmenttherapy / Instagram)
3 / 10 Las alfombras y mantas le dan un toque acogedor a las habitaciones, más aún si se emplean colores vivos, como el fucsia o guinda. Una planta ornamental en un rincón nunca está de más. (Foto: @apartmenttherapy / Instagram)
4 / 10 Para los amantes de Frida Kahlo, esta habitación propone un estilo inspirado en el arte popular. Las alfombras floridas y distintos tipos de plantas harán de tu espacio íntimo un lugar único. (Foto:@labohemehouseofthewishingtrees / Instagram)
5 / 10 El uso de ciertas telas, como las satinadas, suman a la hora de crear un ambiente sensual. Un perfecto dormitorio unisex para disfrutar en pareja. (Foto: @apartmenttherapy/ Instagram)
6 / 10 En cuanto a decoración, las guirnaldas y cuadros con mensajes de humor son una buena opción para revestir las paredes. La cama de fierro y una lámpara del mismo material ayudan a construir una pieza romántica. (Foto: @labohemehouseofthewishingtrees/ Instagram)
7 / 10 Un espacio ascético, pero a la vez confortable también puede ser ideal para compartir en pareja. El color blanco es asociado a esa sensación de paz que requerimos a la hora de ir a descansar. (Foto: @myscandinavianhome / Instagram)
8 / 10 Los cojines a cuadros le dan una onda 'naif' al espacio y se convierten en el acento de color de un espacio más bien neutro. La cabecera en capitoné seduce gracias a sus formas y completa un ambiente cálido. (Foto: @lizmariegalvan/ Instagram)
9 / 10 Una habitación puede lucir sobria sin necesidad de ser aburrida. El gris es un color ideal para utilizar en un dormitorio de pareja, ya que es más bien unisex. (Foto: @myscandinavianhome/ Instagram)
10 / 10 Una habitación en tonos neutros no tiene por qué ser aburrida. Aquí las texturas (como la del puff y la de la manta sobre la cama) no solo aportan calidez, sino también carácter. (Foto: @delikatissen / Instagram)
Aunque es un lugar que está lejos del escrutinio de una visita, una habitación no tiene por qué lucir como una madriguera. Al contrario, este espacio íntimo puede ser el lugar ideal para volcar nuestros gustos y afinidades en decoración de una manera más personal.
Hay ideas para todos los gustos: para los bohemios, sofisticados, minimalistas y para los que se arriesgan al cambio. Solo hay que elegir el estilo que mejor se adapte a nosotros y a nuestro estilo de vida.
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