Dentro de la variada oferta inmobiliaria, aparecen los departamentos de pequeñas dimensiones, ideales para parejas, solteros o familias con un hijo. En estas áreas de reducido metraje, es factible crear una sensación de amplitud. ¿De qué manera? Al optimizar el espacio con el uso de mobiliario mínimo en zonas estratégicas o al incluir muebles que permitan dos o más funciones.
El secreto está en no afectar la circulación y emplear una paleta de colores claros y texturas con tonos cálidos. En la implementación de una vivienda de escasos metros, los muebles multiusos y versátiles cumplen un papel importante, pues permiten ganar espacio al plegarse, ocultarse y transformarse en una nueva propuesta.
Asimismo, mantener el orden es básico cuando se vive en un espacio pequeño. Por ello, los muebles deben ofrecer áreas de almacenaje. Un baúl al pie de la cama puede hacer las veces de banco o de un compartimento para guardar ropa o mantas.
Las camas con cajones en la parte inferior, también ofrecen una solución para guardar elementos. Se aconseja no emplear muebles pesados o de líneas curvas, porque recargan el ambiente. Sobre los colores, son ideales los tonos claros y neutros, pues hacen lucir las estancias más grandes.