A simple vista parece una taza normal en la que puedes servirles té o café a tus invitados. Pero cuando la mires de cerca, te darás cuenta de que tomar algo aquí es imposible.
Este proyecto fue creado por Sharona Merlin durante sus estudios en el Shenkar College of Engineering and Design en Israel. Su idea fue crear una ilusión óptica en todos quienes se acercan a sus tazas: al mirarlas de frente no tienen nada de extraordinario sin embargo, cuando las miras desde arriba, descubres que es casi plana por completo.
No solo la taza crea esta ilusión sino también el vaso y la cuchara. Una vez más, los diseñadores te muestran que no debes confiar en todo lo que te muestran tus ojos.