1 / 6 La cuna del bebé puede transformarse en decenas de cosas diferentes para que nunca deje de ser útil. (Foto: Shutterstock)
2 / 6 Como escritorio. Solo hay que retirar uno de los dos lados y ajustar la base lo más alto posible. Puedes pintarla de otro color o añadir ganchos para que tus pequeños cuelguen sus materiales de trabajo. (Foto: Difusión)
3 / 6 Como revistero. Usando los dos paneles laterales se puede armar un revistero para el cuarto de los niños. Ambos paneles son unidos con piezas de madera para darles estabilidad. (Foto: Difusión)
4 / 6 Como banca. Hay diferentes maneras de convertir una cuna en bancas, ya sea para exterior o interior. Puedes tomar una de las piezas laterales para usarla como respaldar. (Foto: Difusión)
5 / 6 Como baúl de juguetes. Los lados de la cuna pasan a intercambiarse para encajar con los del baúl, que se complementan con dos piezas de madera para hacer la tapa y el fondo. (Foto: Difusión)
6 / 6 Como una carretilla. Esta carretilla es perfecta para que los niños se diviertan al aire libre y tú puedas transportar todas sus cosas. Vas a necesitar el panel frontal y uno lateral de la cuna, ruedas y otros materiales. (Foto: Difusión)
Una vez que los bebés crecen, llega la gran pregunta: ¿qué hacemos con su cuna? Donarlos es una buena alternativa pero también existen otras maneras de darles una nueva vida adaptándolos a la nueva vida de los niños.
La cuna es uno de los muebles que más transformaciones pueden sufrir para convertirse en un sinnúmero de objetos nuevos. Mesas, bancas e incluso carretillas son algunos ejemplos cuyos tutoriales paso a paso pueden encontrarse en internet.
Aquí recopilamos cinco ideas para que la cuna de tu bebé nunca deje de ser parte de su vida.