La pandemia de COVID-19 privó a miles de adolescentes de ir al colegio y de reunirse cara a cara con sus amigos. Con más tiempo libre y sin poder salir de casa, muchos de ellos encontraron en el anime y la cultura japonesa el refugio perfecto para entretenerse y mantenerse conectados con sus pares.
En Tarapoto, en la región San Martín, los menores fascinados por la animación japonesa tienden a involucrarse con la historia de las series, dedicando horas a ellas y a los diferentes géneros que ofrecen, como nos cuenta Ana Purnot, 13 años. En muchos casos, los niños participan en eventos de cosplay que les permiten expresarse y acercarse más a esta cultura.
“Muchos nuevos fans del anime han nacido gracias a esta pandemia, ya que han encontrado series que han resonado con ellos”, dice a El Comercio David Ramírez, comunicador de la Universidad de Lima y experto en el anime y cultura japonesa.
Por su parte, Elizabeth Pelaez Sagastegui, literata egresada de la PUCP e investigadora del anime y el manga, señala que en un contexto como la pandemia el anime “funciona como un buen espacio de desfogue, donde los adolescentes pueden encontrar un refugio y alejarse del caos de la vida real, donde pueden sentir placer con algo que les gusta”.
“Considero que el consumo de anime sí ha aumentado en el último año. Hay que tener en cuenta que los adolescentes son muy hábiles con el uso de las redes sociales y estos son espacios en los que las abundantes páginas de publicidad de animes hablan de su contenido y así los adolescentes encuentran espacios de donde enterarse de las novedades”, apunta a este Diario.
Aunque no hay un estudio que mida propiamente el aumento del consumo de animes en los adolescentes durante la pandemia, un informe citado por Bloomberg en mayo de este año revela que el interés de los espectadores estadounidenses en el anime japonés se disparó en el 2020.
Según la investigación de Parrot Analytics, una startup que mide la demanda de la audiencia de contenido televisivo que se muestra en Internet, y la empresa de investigación de mercado Global Connects, el interés en los programas de anime medidos a partir del comportamiento de las audiencias en línea aumentó un 33% en el primer trimestre en comparación con el año anterior.
“Los espectadores estadounidenses también estaban más interesados en el contenido japonés en comparación con otras ofertas en idiomas extranjeros, lo que representa aproximadamente un tercio de la demanda en los últimos seis trimestres, según el informe. Encabezó el contenido en español, con un 21%, y la programación coreana, con un 11%”, indica el artículo de Bloomberg.
A raíz de las dificultades que planteó el COVID-19 y el gusto por esta expresión cultural, al menos dos emprendimientos vinculados al mundo del anime nacieron en Tarapoto en los últimos meses. Las comerciantes a cargo de estos establecimientos cuentan que el gusto por el anime ya existía en Tarapoto y que algunos de los artículos más vendidos son los relacionados con los animes Naruto y One Piece.
Puede conocer más de cómo se vivió el consumo del anime durante la pandemia en la región San Martín en el reportaje en video que acompaña esta nota. En él encontrará también las recomendaciones de los expertos de los mejores animes para adolescentes.