Redacción EC

Los goles de tiro libre son especiales. Por su espectacularidad, su nivel de dificultad, la barrera, etc. Y no cualquiera puede hacerlos. Solo algunos tienen la precisión y el buen pie que se necesita para convertir en gol una falta.

Stef Peeters es uno de esos jugadores. Él milita en el Rotterdam de  y en el duelo ante el conjunto filial del PSV, convirtió un golazo de pelota parada. El disparo fue tan perfecto que sobró al arquero y se metió por el ángulo derecho del arco. 

El tanto del mediocampista de 21 años es uno de los mejores de la semana.

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