Sporting Cristal: análisis de la derrota ante Racing en Lima

Era un partido bastante cero a cero.

El problema de Cristal fue con la pelota. Dio una cantidad exagerada de pases sin ganar metro alguno. Tuvo posesiones prolongadas en distintos pasajes, aunque inofensivas. En Lima, como en Avellaneda, el equipo de Ahmed se resignó a pasar el balón de un lado a otro. Siempre de manera transversal. Una buena posesión es aquella que no se conforma únicamente con el contacto con la pelota, sino con la consecuencia que genera la misma.

Y esto pasó por dos cosas:

1. El balón nunca llegó a una posición que coja sorprendido a Racing. Los laterales-volantes (Estrada por derecha; Cossio por izquierda) nunca pudieron convertir a los dos delanteros (Ávila y Blanco) en cuatro.  De alguna manera, se dio ese temor natural del futbolista de abandonar su zona de confort para no quedar mal parado. Es decir, abandonar su zona defensiva. Los laterales-volantes dependen de la conexión de los volantes internos para llegar con sorpresa por la banda. Y eso ayer no se dio. Y allí el segundo problema.

2. La conexión Cazulo-Lobatón y Cazulo-Calcaterra en salida no fue la ideal. El balón nunca llegó a Lobatón con claridad, espacio ni tiempo adecuado. Racing tomó a Lobatón y Calcaterra. Le dejó la pelota a Cazulo. Y esa no es precisamente su mejor virtud. El pase de Cazulo en salida es importante para conectar a los medios, pero eso no se dio. Eso obligó al equipo a saltear líneas. Y el pase largo pasó de ser una decisión a una obligación. Obligó, además, a los delanteros a recibir siempre de espaldas. Nunca consiguieron correr hacia delante. La poca fluidez en el medio les impidió alternar sus movimientos con otros más profundos.

El partido era muy cero a cero. Fue parejo en el trámite. No se arriesgó más allá de lo justo. Ni Cristal ni Racing. Se desniveló por un error de Revoredo. Es el riesgo de respetar un estilo: salir jugando desde Penny. Hoy le tocó a Revoredo. Mañana será otro, quizás. Eso sí, a Cristal le deben hacer más goles por rechazar el balón que por salir jugando. De hecho, este debe ser el primero en lo que va del año.

¿El resultado deja algo positivo? En mi opinión, sí. Cristal enfrentó al campeón argentino. Y dominó en la mayor parte del juego. Racing no tuvo un circuito de juego fluido. Las ocasiones de riesgo que generó fueron producto de virtudes individuales o pelotazos, mas no por una buena elaboración. El resultado, en definitiva, pudo ser para cualquiera. La diferencia de presupuesto entre ambos equipos no se vio reflejada en la competencia de los dos partidos. En la cancha. Y ese sí es un factor positivo. Cristal debe seguir trabajando. Mucho más.

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