Néstor Retamar, entrenador y símbolo del humilde Atlas que este sábado logró el ascenso a la categoría C del fútbol argentino, no pudo evitar conmoverse al declarar tras el 2-0 ante Deportivo Paraguayo.
El DT fue consultado sobre qué se le venía a la cabeza al saborear el triunfo y un pase a una categoría superior. De inmediato recordó que mientras Atlas jugaba, su padre se encontraba delicado de salud.
“Mi papá. Él no me escucha ahorita, pero yo se lo dije. Él quería ver a su hijo campeón. El lunes o martes me lo operan y no sé si pase, pero por lo menos hoy yo estuve”, sentenció el director técnico.
Atlas, humilde equipo argentino que se hiciera famoso internacionalmente cinco años atrás por protagonizar el reality “Atlas, la otra Pasión” (Fox Sports) logró este sábado un histórico ascenso a la categoría C. Los goles llegaron por intermedio de Gonzalo Valenzuela al minuto de juego y de Nico Pérez a los 5 minutos del complemento.
Aunque actualmente es transmitido por la cadena DirecTV, en sus inicios “Atlas la otra pasión” contaba la historia de un humilde equipo de barrio con una historia en la que los momentos amargos siempre fueron más que los felices.
El reality tuvo como protagonistas no solo a los futbolistas (Wilson Severino, Rata Rodríguez, etc.) o al ya mencionado DT, sino también a los viejos y queridos dirigentes del ‘Marrón (así se le apodaba al club), tanto como a los pocos, pero muy fieles hinchas que seguían al plantel en los partidos.
Con cámaras al interior de los vestuarios que dejaban a vista de millones de televidentes en Latinoamérica cómo se vive el antes, durante y después de un partido por el ascenso, “Atlas la otra pasión” captó adeptos en diversas latitudes.
El club incluso hizo giras fuera de la Argentina, logrando visitar Perú para jugar con el también emblemático Deportivo Municipal.
Néstor Retamar y su discurso incluso sería destacado por el canal de deportes del periodista Juan Pablo Varsky, con un mensaje simple pero contundente: “Retamar, ayer, hoy y siempre”.
Cabe indicar que Retamar se dio el gusto de hacer debutar en el fútbol a su hijo y dirigirlo, placer que pocos entrenadores han tenido en su vida.