La jugada no tuvo que ver con la intención de uno u otro tenista. El alemán Florian Meyer respondió con un revés el tiro de David Ferrer, y la pelota dio en la cara de uno de los recogebolas.
Meyer pidió disculpas. En su cabeza no estaba que la pelota pegara en la cara del asistente de campo. Las imágenes son algunas de las curiosidades que se dan en el primer Grand Slam del año.
De hecho, fue la propia cuenta de YouTube del Abierto de Australia la que colgó este video.
La victoria, finalmente, fue para el español por 6-7, 7-5, 6-2 y 6-1. Ferrer enfrentará en cuartos de final al checo Tomas Berdych.