El oro subió más de un 2% el miércoles y traspasó el nivel de US$1.600 por primera vez en casi siete años, después de que Irán lanzó ataques con misiles contra las fuerzas estadounidenses en Irak.
Los precios retrocedieron después de que declaraciones del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y del ministro de Relaciones Exteriores de Irán aliviaron el miedo a una escalada inmediata en el conflicto, pero se mantenían bien apuntalados.
A las 0758 GMT, el oro al contado ganaba un 1% a US$1.589,40 por onza luego de avanzar más temprano un 2,4% a US$1.610,90, su nivel más alto desde marzo de 2013. Los futuros del oro en Estados Unidos trepaban un 1,1% a US$1.590,90 por onza.
La televisión estatal iraní dijo que al menos 80 “terroristas estadounidenses” murieron en ataques con 15 misiles lanzados por Teherán contra objetivos estadounidenses en Irak el miércoles por la mañana.
La ofensiva de Irán se produjo horas después del funeral del comandante Qassem Soleimani, cuya muerte la semana pasada en un ataque con aviones no tripulados de Estados Unidos intensificó los temores de un conflicto mayor en Oriente Medio.
La aversión al riesgo provocó caos en los mercados financieros, con una fuerte caída de las acciones asiáticas. Sin embargo, los lingotes recortaron algunas ganancias después de que Trump dijo en un tuit el martes por la noche que “¡Todo está bien!”, y que haría una declaración el miércoles por la mañana.
El paladio tocó un máximo histórico de US$2.079,50 la onza y posteriormente ganaba un 1,3% a US$2.078. La plata subía un 0,7% a US$18,52 por onza tras subir a US$18,85, máximo desde principios de setiembre, y el platino declinaba un 0,2% a US$969,46 por onza.