(Foto: El Comercio)
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Redacción EC

¿Qué define a una persona generosa? ¿Qué nos hace dar a los demás sin esperar nada a cambio? ¿Acaso es algo religioso o moral? ¿De verdad hay satisfacción y plenitud personal al dar desinteresadamente?

Una cosa que me impactó al vivir en Estados Unidos es el de su gente: donar su tiempo, ayudar al extraño y donar su dinero sin que sean ricos es común. Existe una cultura de dar que es motivada desde corta edad en los diversos estratos sociales.

En el Perú, felizmente, hemos avanzado en infraestructura en los últimos años. Existen muchas organizaciones no gubernamentales (ONG) que hacen un trabajo realmente magnífico apoyando a la niñez, la educación, la salud, el emprendimiento, la ética, el medio ambiente y otros aspectos muy relevantes.

Pero si buscamos los estudios sobre filantropía y vemos el ránking mundial de la Charity Aid Foundation (CAF), el Perú pasó del lugar número 65 en el Índice Mundial de la Caridad en el 2016 al puesto 88 en el 2017. Un terrible retroceso en el año que más lo necesitábamos.

Ahondando en los factores evaluados por la CAF (donar tu tiempo, dinero y ayudar desinteresadamente a un extraño), vemos que el Perú cayó del puesto 90 en el ránking de donación de dinero en el 2016 al 108 en el 2017. Aparentemente, son relativamente pocos y cada vez menos los que han descubierto en nuestro país las satisfacciones de la generosidad.

Según uno de los últimos estudios de la CAF, hay cinco razones principales que las personas generosas atribuyen como motivadoras de su compromiso desinteresado con los demás.

1. Te hace sentir bien. La satisfacción es especial y duradera.
2. Fortalece los valores. El 96% de los encuestados sentía que tenía un deber moral de usar lo que tenía para ayudar al resto.
3. Dar nunca había tenido tanto impacto. Las ONG hoy están mejor organizadas que nunca para facilitar la donación efectiva y segura del tiempo y dinero.
4. Ser ejemplo de generosidad para nuestros hijos es sumamente relevante.
5. El efecto dominó en amigos y compañeros es gratificante. Expande nuestro círculo de influencia de manera efectiva y muy satisfactoria.

La generosidad es uno de los cinco factores clave en la evaluación de la felicidad de una nación según el Reporte Mundial de Felicidad. El PBI per cápita, la expectativa de vida saludable, el sistema de apoyo social, la libertad, la confianza social y la percepción de corrupción, completan los factores evaluados.

El año pasado con el impacto de El Niño costero quedó demostrado que somos capaces como sociedad de unirnos y actuar efectivamente para beneficio desinteresado de los afectados. Nuestro país requiere de nuestra generosidad como personas y empresas. Tomemos una fundación y aportemos algo todos los meses, es seguro que con esta decisión se cambie la sonrisa de un niño o niña con labio leporino, se ayude a una persona con cáncer, se eduque o se den las herramientas para progresar a una o varias personas. Lo que sea que decidas hacer, no solo entregues tu dinero, da algo de tu tiempo. El compromiso y los valores son lo que sacarán adelante a nuestro querido Perú.

¡Sé el cambio que quieres ver en el Perú!

POSDATA 
Estas son algunas de las muchas  ONG que puedes hacer tuya:

- Teletón.pe
- Operaciónsonrisa.org.pe
- Visionmundial.org.pe
- Aldeasinfantiles.org.pe
- Techo.org
- Caritas.org.pe
- Sarperu.org
- Prisma.org.pe
- Care.org.pe
- Unicef.org/peru
- Misionhuascaran.org.pe

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