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(Bloomberg) -- Boeing Co. y Space Exploration Technologies Corp. no conseguirán este año la certificación para enviar astronautas al espacio, y podrían tener que esperar hasta el 2019 debido a potenciales peligros para la seguridad, de acuerdo con investigadores estadounidenses.
Los sistemas de paracaídas de Boeing y grietas en las turbinas de motores de SpaceX son parte de los riesgos que podrían retrasar la certificación hasta que concluya un contrato de Estados Unidos con Rusia para transportar personas a la Estación Espacial Internacional, afirmó la Oficina de Responsabilidad Gubernamental (GAO, por sus siglas en inglés) el jueves en un reporte. La NASA ha accedido a renegociar los contratos de cada compañía para posponer las reseñas de certificación.
Desde que el programa del Transbordador Espacial concluyó en el 2011, los astronautas estadounidenses han dependido de Roscosmos, la Agencia Espacial Federal Rusa, para ser llevados hacia la estación. La NASA eligió a Boeing y a SpaceX en el 2014 para desarrollar capacidades de transporte de tripulación comerciales, con el primer vuelo de rutina llevando a astronautas de la NASA a la Estación Espacial Internacional ahora programado para no antes de fines del 2018.
“Dados los retrasos en el Programa de Tripulación Comercial, la GAO recomienda que la NASA desarrolle y reporte al Congreso sus planes de contingencia para mantener la presencia estadounidense en la Estación Espacial Internacional más allá del 2018”, escribió la agencia en su reporte, que señala que la NASA estuvo de acuerdo con la recomendación. La cápsula espacial de Boeing es la CST-100 Starliner. SpaceX, cofundada por Elon Musk, ha nombrado a su cápsula Crew Dragon.
Los hallazgos de la GAO se dan después de un reporte de septiembre realizado por la Oficina del Inspector General de la NASA, que advirtió de “múltiples retos que probablemente retrasarán el primer vuelo de rutina que lleve a astronautas de la NASA a la Estación Espacial Internacional hasta fines del 2018”. Desafíos de financiación de la agencia, demoras en el proceso de evaluación de la NASA y retos técnicos en los diseños de las naves espaciales han sido algunos motivos por los que el programa se ha retrasado.
