(Foto: El Comercio)
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Marcela Mendoza Riofrío

¿Se imaginan un equipo de 200 personas contratadas solo para actualizar el software que maneja una entidad estatal? ¿Se imaginan que dicho software esté elaborado en un lenguaje creado 30 años atrás? Suena fantasioso, pero esto todavía ocurre en algunas instituciones peruanas y es uno de los grandes retos que debe afrontar el Estado en su carrera por mejorar su nivel de .

De hecho, en una de dichas entidades, ya se ha ido migrando diversas operaciones. Sin embargo, no se ha podido mover la que maneja planillas, pues está en un lenguaje muy antiguo (cobol) y se corre el riesgo de colapso si se deja de operar.

En el proceso de intentar la migración, se encontró que necesitan mantener trabajando a una persona que ya le toca jubilarse, pues no hay gente nueva capaz de reemplazarla. Se intentó capacitar a una joven, pero la complejidad del diseño y la cantidad de funcionarios públicos que monitorear en la planilla impide su reemplazo hasta que se tenga listo un nuevo sistema.

La media de funcionarios de mantenimiento de sistemas estatales del sector está en edad madura, aseguran los consultores especializados. Además, pueden aprender a usar nuevos sistemas, pero deben estar acompañados de nuevas generaciones que entren en proceso de formación. Un camino de larga duración, pero indispensable para lograr mejorar la productividad de dichas instituciones. No basta con comprar software avanzado si no hay una adecuación del personal que lo manejará, aseguran.

El cambio o transformación se requiere realizar en todas las organizaciones y desde dentro, añade Fernando Grados, director de Dominio Consultores. “Hay que cambiar los paradigmas e iniciar un cambio en la cultura organizacional. Preparar a los líderes y colaboradores para participar de este cambio”, afirmó.

NUEVA MENTALIDAD
El CEO de Everis, Javier Hoyle, destacó que es vital preocuparse hoy por desarrollar las capacidades de los profesionales que tomen la posta. Se trata no solo de prepararlos en el manejo de tecnologías modernas; sino de prepararlos para tener las capacidades que les permitan afrontar las necesidades de innovación en un mundo digital que avanza muy rápidamente. “Ya están a la vuelta de la esquina tecnologías como Inteligencia Artificial, Blockchain, IoT, etc. Y se necesita estar listos”, advirtió.

El mundo de hoy, destacó Hoyle, necesita de gente con una mentalidad digital, la cual incorpora valores como la inmediatez, el acceso a información transparente, la colaboración y la apertura. “Hoy más que nunca no hay que ser digital, conocer lo digital, sino Vivir en Digital. Este es quizás el punto más complejo de alcanzar”, recalcó.

A su modo de ver, además de montar muchos programas de capacitación, hace falta adecuar los modelos de contratación tal como han venido haciendo las entidades privadas. Se necesitan, dijo, marcos de contratación flexibles que trasladen la forma en que operan las empresas emprendedoras al Estado, generando espacios para la innovación contemplando la cocreación, la cooperación y las economías compartidas.

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