Turismo de reuniones y convenciones dejará US$700 millones

Hacer de Lima un destino top de reuniones y convenciones a escala internacional no es una tarea fácil ni por asomo. A la falta de infraestructura para albergar esta clase de eventos y agilizar el tránsito de los visitantes por la capital, se debe añadir el hecho de que la ciudad ha estado relegada  por años en la International Congress and Convention Association (ICCA). Esta es la organización que convoca a los gremios que llevan a cabo ferias, reuniones y convenciones, y deciden dónde van a hacerlas. Así, Lima ha sido medio invisible para el mercado mundial de estas actividades.

Ayer, sin embargo, durante la inauguración de la Feria Internacional del Mercado de Reuniones e Incentivos de América Latina y el Caribe (Fiexpo), que por primera vez se desarrolla en nuestra capital, el Mincetur y el Buró de Convenciones esbozaron un panorama distinto. Ello con base en un plan de acción que marca como hito la construcción del centro de convenciones de San Borja, una obra que deberá estar lista a mitad del 2015, justo para el inicio de la cumbre de delegados del Banco Mundial.

“Hemos venido trabajando desde hace un par de años en escalar posiciones en el ránking ICCA, y hemos pasado del puesto 51 con 41 eventos en el 2012 al puesto 42 con 54 eventos en el 2013, solo en Lima”, detalla el presidente del buró, Carlos Canales.

El ejecutivo estima que, para el 2018, la ciudad estará en la capacidad de albergar más de 100 eventos por año, los que deberán generar un movimiento económico de US$700 millones, un crecimiento de 133% con respecto a lo que movilizó esta actividad en el 2013.

La proyección se sustenta en una serie de eventos y megaeventos ya confirmados que Lima albergará hasta el 2019 y que hacen viables los números: la COP 20, la Juegos Panamericanos.

En paralelo, deberán edificarse hasta dentro de cuatro años inversiones hoteleras –ya en marcha– por US$2 mil millones, de las cadenas Intercontinental, Swissôtel, Marriott, Hyatt, NH, Dassler, Atom, Los Delfines, entre otras, y un recinto ferial de 50 hectáreas al sur de Lima (no se ha confirmado aún el distrito) para 150 mil personas.  

LIMA DE REUNIONES
Arnaldo Nardone, ex presidente de ICCA, apunta que para concretar este plan hace falta un impulso estatal que no se restringe a la inversión de capital.

“Lo que más se necesita es la promoción de Lima, colocar al destino en la vitrina mundial”, dice. El especialista destaca que el 92% de los eventos ICCA que se realizaron entre el 2008 y el 2012 reunió a menos de 1.000 personas. Ergo, concluye que, si bien la infraestructura es importante, con lo que tiene nuestra ciudad puede seguir escalando posiciones en el ránking.

Al margen de ello, la ministra de Comercio Exterior y Turismo, Magali Silva, confirmó que el centro de convenciones de San Borja recién estará operativo para la cumbre del Banco Mundial (julio del 2015), no para la COP 20 de finales de este año. Este último evento se hará en el Pentagonito, en una plataforma especial levantada para la ocasión que costará S/.70 millones, según el buró.

En el sector empresarial ligado al turismo, se espera que este plazo se cumpla con precisión, pues de lo contrario no habrá dónde realizar la cumbre, literalmente: todos los hoteles y sus salas estarán ocupados al 100% en esas fechas.

Entre tanto, Lima seguirá aprovechando el Fiexpo hasta mañana.