No tiene más de dos semanas en este mundo, pero está a punto de sufrir la amputación de una extremidad. Una recién nacida de solo 10 días podría perder su mano izquierda y parte del brazo por una presunta negligencia médica, según informaron sus padres.
Se trata de la pequeña hija de Carlos Díaz e Inés Sánchez. La madre dio a luz de manera accidentada el pasado 18 de febrero. Cuando los médicos del Hospital Nacional de Vitarte la atendieron, le dijeron que todavía no iba a nacer su hija y la enviaron a su casa, pero tuvo que volver al poco tiempo porque el parto era inminente.
“Estaba aprobada para una cesárea pero al final nació por parto normal”, detalló el padre a través de América noticias.
Esta demora en el parto habría hecho que la menor ingiriera líquido amniótico, lo que le causó una intoxicación que una enfermera trató de combatir con un medicamento hasta ahora desconocido. Ésta sería la causa de la gangrenación de la mano izquierda.
“Estamos esperando a ver si va a evolucionar o no. Hubo una junta médica de doctores y me informaron que para el lunes se tiene que hacer amputar la mano antes que la infección pueda avanzar”, añadió el señor Díaz. Actualmente la menor está en el Instituto Nacional de Salud del Niño.
DENUNCIA PENAL
El Ministerio Público, atendiendo el reclamo de los padres, ha presentado una denuncia contra el Hospital Nacional de Vitarte, contra el médico ginecólogo Juan de Dios Ríos La Torre, y la enfermera Cinthya Candela, además de todas las personas que resulten responsables.