“Se procedió al retiro de un poste oxidado que cayó en la cuadra 5 del jirón Orbegoso y así evitar posibles accidentes o inconvenientes”, anunció la Municipalidad de Breña en sus redes sociales hace unos días. El airado reclamo de los vecinos fue inmediato y justificado: los postes ornamentales –cuya función es netamente estética– se han convertido en un persistente peligro para quienes circulan por las calles del distrito.
El portal vecinal Por Ti Breña fue el primero en reportar el desplome de la estructura metálica la tarde del viernes 18. Después de ese aviso, el municipio distrital retiró el poste de la vía pública.
Por ello, El Comercio recorrió Breña por tres días y comprobó que al menos veinte de estas estructuras se encuentran en muy mal estado. Algunas rajadas y rotas desde la base: basta empujarlas con la mano para hacerlas tambalear. Otras con cables eléctricos expuestos y con faroles a punto de caer, al extremo de que el viento es suficiente para que empiecen a balancearse.
—Reclamo vecinal—
Lo primero que Karina Abarca ve cada vez que abre la puerta de su casa, en la cuadra 4 del transitado jirón Castrovirreyna, es un poste inclinado y a punto de desplomarse sobre su fachada. Ella es consciente del riesgo al que está expuesta, pero con el tiempo su molestia se ha convertido en resignación. “Claro que he llamado varias veces a la municipalidad, pero ¿qué vamos a hacer?”, dijo a este Diario.
Un caso similar es el de Sonia Román, quien administra un salón de belleza en la cuadra 1 del jirón Orbegoso. Al lado del cartel con el que promociona su negocio hay una estructura de fierro que podría caerse en cualquier momento. “Tengo que decirles a los clientes que tengan cuidado. ¿Para qué vamos a ir a la municipalidad a reclamar si no van a hacer nada?”, menciona.
“Los vecinos muchas veces se resignan a la idea de que nada va a cambiar, debido a que tienen malas experiencias con la municipalidad distrital. […] Ahí juega un rol vital la organización vecinal. Donde hay organización es más probable que se encuentren experiencias positivas para la resolución de problemas en el barrio”, sostiene Laura Lozada, economista y urbanista consultada para esta nota.
Este Diario contactó al municipio de Breña el miércoles por la noche para indagar sobre este asunto. Horas después, la mañana del jueves, la estructura de fierro frente a la vivienda de Abarca fue retirada.
La gestión del alcalde José Li Bravo (Acción Popular) respondió a través de un comunicado enviado por su oficina de prensa: “Los mencionados postes ornamentales forman parte del inmobiliario urbano del distrito. Por lo tanto, se encuentran bajo la administración de la Municipalidad de Breña. Actualmente, se vienen retirando los que se encuentran en mal estado y a otros se les brindará mantenimiento”.
Este mobiliario urbano fue instalado en el 2008, en la gestión de José Gordillo, exalcalde del Partido Aprista fallecido en julio pasado. Rebeca Florián, vecina del jirón Chamaya, indicó que a los postes “jamás les dieron mantenimiento y sus faroles dejaron de funcionar después de tres o cuatro meses de haber sido colocados”.
Al cierre de este reportaje, solo el poste del Jr. Castrovirreyna había sido retirado por personal municipal. En los jirones Manoa, Ticapampa y Chamaya, así como en General Orbegoso y la avenida Bolivia, permanecen estructuras de fierro –y algunas de cemento– en riesgo de desplomarse.
—Valor real—
Los postes ornamentales y sus luces “son especiales y diferentes a los que normalmente instala la empresa de distribución eléctrica, por lo tanto tienen un costo superior al reconocido por la regulación Eléctrica”, informa el Organismo Supervisor de la Inversión en Energía y Minería (Osinergmin).
Según el organismo supervisor, cada distrito debe asumir “los costos del consumo de energía, operación y mantenimiento”. “Ninguno de los postes señalados es de propiedad ni gestión de Enel”, dijo a El Comercio la empresa.
Al respecto, Laura Lozada considera que es necesario reevaluar qué competencias y recursos deberían administrar las municipalidades distritales.