Parejas que demuestran que el amor es para siempre
Parejas que demuestran que el amor es para siempre
Redacción EC

LUIS SILVA NOLE /

Un bastón en una mano y la mano del amor de toda su vida en la otra. Su nombre es Domingo Esteban Zevallos Morán, pero su corazón se llama Maximiliana Esther Enríquez Mendoza. A paso lento, el abuelo , en el rincón más romántico de , sin despegarse de su amada.

Él de 95 años y ella de 76 hacen que el blanco de sus prendas reemplace al rojo pasión de los años mozos. Ellos demuestran que el amor de pareja en los años dorados tiene su propio ritmo y sabor. Sesenta años de matrimonio, cinco hijos y nueve nietos dan a estos arequipeños la autoridad suficiente para hablar sobre cómo mantener una relación sentimental por tantas décadas.

“Comprensión única, para todo. Cariño mutuo. La sinceridad. Cooperar ambos en la educación de los hijos, con los ahorros que se deben hacer en la casa. Enseñarles valores a los hijos”. Maximiliana la tiene clara. Su lista de prioridades tienen la aprobación de su esposo.

“En resumen, se necesita comprensión, comunicación, respeto y confianza”, acota ella.

“Un hombre no puede ser muy duro en las indicaciones a su esposa. Todo con cariño, pues. Con esa fórmula, han pasado los años y aquí estamos. Siempre hay que darle a la mujer el sitio que merece. Ella no se cansa nunca. La mía, así chiquita como es, un día movió un armario y yo me quedé con la boca abierta”, explica Domingo antes del Día de San Valentín. “La primera vez que la vi, en casa de una amiga, la miré a los ojos y me encandiló”, recuerda.

Ambos viven solos en Barranco. Sus hijos y nietos están en el extranjero. “Ahora seguro que nos verán en Internet”, coinciden.

Para Carmen Bravo de Rueda, psicóloga de la clínica Ricardo Palma, “a diferencia de los jóvenes que hoy conviven como pareja, pero que en la práctica no lo son porque cada uno tira para su lado en amistades, dinero o intereses, los adultos mayores van de la mano, comprometidos, compartiendo la vida, enamorados, con comprensión, comunicación, confianza y amor”.

Antes había más compromiso y decisión, hoy las parejas dicen que, si no les va bien, se separan, señala Bravo de Rueda. “Siempre en situaciones ajenas a patologías, la autonomía es buena para unas cosas y mala para otras. Todo extremo es malo”, explica la psicóloga.

Isabel Chávez Peláez y José Humberto Tenorio Rodríguez, ambos de 76 años y de Amazonas, también dan en Barranco el secreto de sus 54 años de casados. “Él se preocupa por mí y yo por él”, refiere Isabel. “Uno no se puede casar a ver qué pasa. No. Esto sea para siempre”, indica José. Tienen cuatro hijos, seis nietos y dos bisnietos.

Según el especialista en investigación de mercado Magín Pérez, no hay ofertas de eventos para que los adultos mayores festejen hoy.

Como dicen las parejas de esta nota, la pasarán comiendo algo rico en casa o caminando en un parque, “como todos los días: con amor”.

ÉPOCA DE RELATIVISMO
En décadas pasadas, en las parejas predominaba un marco de valores determinista –“para siempre”–, hoy prima uno relativista, derivado de los logros de la mujer en economía, estudios y trabajo, según el sociólogo Aldo Panfichi.

COMPENETRACIÓN ES LA CLAVE
Más allá de si son parejas antiguas o modernas y de los intereses personales, las parejas duran en la medida del grado de compenetración que tengan en las distintas etapas de la vida en común, dice Panfichi.

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