Los vecinos de Barranco están actualmente desprotegidos ante cualquier emergencia que se produzca en el distrito, ya que los más de 40 serenos que actualmente trabajan ahí han decidido acatar una huelga por el incumplimiento del pago de sus remuneraciones.
Ellos protestaron esta noche en medio de la inauguración del renovado Puente de los Suspiros e intentaron hablar con la alcaldesa Jessica Vargas pero esta solo atinó a realizar la inauguración y retirarse inmediatamente del lugar.
Según refieren, desde julio los pagos se han ido retrasando y, hasta el momento, les adeudan el monto correspondiente a los meses de noviembre y diciembre, así como la gratificación.
Además, señalan que cerca de 100 agentes fueron despedidos injustificadamente ante los constantes reclamos. A los trabajadores que continúan les han suspendido sus vacaciones por falta de personal.
Asimismo, refieren que las condiciones en las que trabajan no son las óptimas, pues hace más de tres semanas los vehículos no tendrían combustible, por lo que ellos deben hacer sus rondas a pie. Incluso manifiestan que hacen colectas para comprar el alimento de la brigada canina del distrito porque, según indican, el municipio no destina dinero para estas compras.
Al ser cuestionada al respecto, Vargas negó las acusaciones y señaló que “en estos días” se regularizarían los pagos; sin embargo, no precisó la fecha exacta. Vargas sostiene que esta protesta tendría tintes políticos a puertas de la transferencia de la gestión.