Una de las piezas fundamentales para el buen funcionamiento de un hospital es el servicio de lavandería: la limpieza es clave para frenar el avance de la pandemia por el COVID-19. El Comercio pudo confirmar que cuatro de los seis trabajadores de esta área del Hospital Sergio E. Bernales de Collique han sido infectados de coronavirus. Ellos señalan que el contagio fue por “lavar ropa contaminada” y que les dijeron que eran de pacientes de otras patologías. Aseguran que la manipularon sin la adecuada protección.
“Nos han obligado a lavar esa ropa contaminada, que dijeron que iba a ser desechable. Nos hemos contagiado por el recojo del tacho que estaba en emergencia, pero ahí todo es COVID-19”, dijo a este Diario uno de los cuatro trabajadores de la lavandería que ha resultado positivo por coronavirus.
Sin protección
Los entrevistados para esta nota –tres de los cuatro infectados– relataron cómo habría sido el contagio. Todos están aislados en sus propios hogares.
Hace algunas semanas, un jueves, les ordenaron recoger la ropa de uno de los tachos que está en la puerta de emergencias. En esos días, su jefe les había dicho que la ropa de los pacientes con coronavirus iba a ser “incinerada” y no lavada. Antes de la pandemia por el COVID-19, esta área del Hospital Sergio E. Bernales lavaba entre 800 kilos a una tonelada de ropa; después, al haber ropa descartable, pasaron a lavar 500 kilos.
La jornada ese día fue como cualquier otro: vaciar los tachos donde estaba la ropa sucia, entre ellas sábanas, colchas, frazadas, mandilones y chaquetas; separar lo blanco de los colores y meterlo a la máquina. Todo eso, cuentan, lo hicieron sin lentes y con mascarillas descartables.“Para mí el contagio fue por los ojos, quizá nos agarramos la cara”, cuenta uno. “Dijeron que esa ropa era de pacientes operados de apendicitis, de vesícula, que estaban en otro pabellón. Pero no, era de infectados de COVID-19 en emergencias y en UCI”, indicó otro de los trabajadores.
Una semana después de este hecho, empezaron a manifestarse los síntomas en uno de los cuatro infectados. Él vive cerca del hospital e iba caminando. “Llegué cansadísimo, como si hubiera corrido miles de metros. Les dije a mis compañeros que me dolía la cabeza. Nosotros habíamos estado cuidándonos”, señaló. Días después, el malestar se volvió más agudo y junto a sus compañeros –quienes no tenían síntomas– se sacaron la prueba. El resultado dio positivo de COVID-19 para los cuatro.
Desde entonces, fueron enviados a sus casas. Los entrevistados por El Comercio indicaron que a sus familiares, quienes viven con ellos, no les han tomado las pruebas para saber si están contagiados. Les dijeron que los llamarían tres días después, pero hasta el momento no ha existido comunicación.
“Hay un total desinterés sobre nosotros. Somos trabajadores de salud, pero somos los olvidados. Hablan de médicos y enfermeros, pero salud es todo el conjunto desde el personal de abajo. En el hospital ni importancia nos toman”, precisó uno de los trabajadores, quien hasta ahora no tiene síntomas, pero ha sido aislado en un cuarto dentro de su casa, donde vive con su familia.
Pedidos sin atención
Según contaron los trabajadores contagiados de COVID-19, a través de su jefe solicitaron más de una vez a la dirección del hospital y al área de Epidemiología que les alcancen equipos de protección personal como mandiles, guantes, botas, lentes y mejores mascarillas. Hasta que se infectaron, solo les habían dado mascarillas, pero eran las de tela. Después de conocerse los resultados positivos, llegaron los equipos de protección. “Pero era muy tarde”, resaltó uno de los entrevistados.
“Trabajamos en un área crítica. Antes de que exista la pandemia, casi siempre hemos estado expuestos a todas las enfermedades. Pero no tenemos equipos de bioseguridad. Siempre hemos estado desprotegidos. Es un área que no le prestan la atención debida. Pero nosotros mismos nos hemos estado cuidado, pidiéndole gel a las enfermeras porque no nos daban, lavándonos las manos”, remarcó uno.
Otro de los trabajadores contó que cuando vio en la televisión, el domingo 19 de abril, un reportaje sobre el hospital de Collique con imágenes de los pacientes de COVID-19 que están en emergencia, confirmó que la ropa que tenían puestas –las chaquetas, los mandiles– era la que ellos habían lavado. “Reconocimos que esa era”, dijo. Se pasaron los videos y sus compañeros también la reconocieron.
Algunos de los trabajadores tienen veinte años de servicio en este hospital y aseguran que nunca se habían sentido tan abandonados como ahora. “Psicológicamente nos están tumbando”, comentó otro de los infectados vía telefónica, quien ha tenido fiebre y malestar.
Director niega contagio interno
El director del Hospital Sergio E. Bernales, el médico Julio Silva, respondió a El Comercio que la versión de los trabajadores de la lavandería sobre su contagio de COVID-19 es “totalmente falso” porque la ropa de los pacientes de coronavirus es “descartable”.
“Eso es mentira. Ellos se han infectado fuera del hospital, por una sencilla razón: ninguna ropa de COVID se lava, todo es descartable. Es lo único que te puedo decir”, dijo brevemente y se excusó de estar en una reunión.
¿Hay cura para el covid-19?
Aún no existen pruebas de que alguna vacuna o medicamento pueda prevenir o curar la enfermedad. Sin embargo, los afectados deben recibir atención de salud para aliviar los síntomas; y si el paciente está grave, deberá ser hospitalizado.
La OMS coordina esfuerzos para encontrar la cura contra este nuevo coronavirus que ha acabado con la vida de miles de personas.
¿Cuánto dura el período de incubación del covid-19?
Primero hay que entender que el período de incubación es el tiempo que transcurre entre la infección por el virus y la aparición de los síntomas de la enfermedad.
De acuerdo con estimaciones, el periodo de incubación de la covid-19 oscila entre 1 y 14 días, y en general se sitúa en torno a los cinco días.
Por el momento se continúan analizando y actualizando estos datos para tener una información más precisa y detallada.