Da Vinci murió un 2 de mayo de 1519, a los 67 años.
Da Vinci murió un 2 de mayo de 1519, a los 67 años.

Una tortuga ninja lleva su nombre. Y también un colegio en Surco y un libro de Dan Brown. Ese es el impacto que un tal ha dejado en todo el mundo y en los más diversos planos de la cultura a lo largo de 500 años. Mañana se cumplen exactamente cinco siglos de su muerte y la circunstancia es propicia para ver algunos ejemplos de cómo la multifacética obra del maestro italiano del Renacimiento ha sido adaptada y reinterpretada sin que se perciban signos de agotamiento.

Esa capacidad para reinventarse no solo responde a su talento, sino a la variedad de disciplinas en que el artista italiano se desenvolvió: pintura, dibujo, escultura, arquitectura, ingeniería, ciencia, tecnología, anatomía, música, matemática, botánica, cartografía y más. Un mil oficios que adquirió en vida su estatus de leyenda creativa, casi un superhombre en el sentido que tiempo después postulara Friedrich Nietzsche. De hecho, la trascendencia de Da Vinci como ícono se dice que comenzó en vida: en el cuadro “La escuela de Atenas” (1510-1511), de Rafael Sanzio, se cree que la imagen de Platón está tomada directamente de un barbado y canoso Da Vinci, quien sirvió de modelo. Una aparición considerada casi un cameo de lujo.

Las Mona Lisas de Marcel Duchamp, Banksy y Fernando Botero, respectivamente.
Las Mona Lisas de Marcel Duchamp, Banksy y Fernando Botero, respectivamente.

ESTAMPAS INMORTALES
Pero es su pintura la que más veces ha sido apropiada por otros artistas. Y hablamos de dos obras en particular: la famosa "Mona Lisa", convertida sin lugar a dudas en la obra de arte más reproducida de la historia (ver el recuadro adjunto); y de "La última cena", que ocupa el mismo sitial entre las obras religiosas de todos los tiempos. De hecho, esta última es una de las imágenes favoritas para crear parodias de todo tipo: las hay en versión femenina, como “La primera cena” (1988) de Susan Dorothea White, protagonizada por mujeres de distintas regiones del mundo; está la versión cinematográfica finamente construida por Luis Buñuel en su extraordinaria "Viridiana" (1961); y otras tan delirantes como las que colocan a personajes de Marvel o "Star Wars" alrededor de la sagrada mesa. Para todos los gustos.

El famoso hombre de Vitruvio –popular estudio anatómico fechado en 1490, según los diarios de Da Vinci– también ha sido alterado a diestra y siniestra, cambiando al ser humano por un obeso Homero Simpson, un Pikachu o el robot Bender de “Futurama”.

En “La primera cena” ( 1988 ), Susan Dorothea White convierte “La última cena” en una pintura protagonizada por mujeres de distintas partes del mundo.
En “La primera cena” ( 1988 ), Susan Dorothea White convierte “La última cena” en una pintura protagonizada por mujeres de distintas partes del mundo.

A IMAGEN Y SEMEJANZA
Con el tiempo, la obra de Da Vinci se ha hecho cada vez más ubicua. La novela "El código de Da Vinci", rotundo 'best seller' firmado por el estadounidense Dan Brown en el 2003, es una historia repleta de fórmulas y clichés, pero que engancha con su suspenso y enigmas. La mayoría de ellos están vinculados con la obra de Da Vinci (de allí el nombre) y en su momento provocó un renovado interés por dichas obras. El furor fue tal que tres años después se adaptó al cine bajo la dirección de Ron Howard y el rol protagónico de Tom Hanks.

En el videojuego "Assassin’s Creed II", el brillante Leonardo sirve como un personaje central, al ser quien ayude al protagonista, Ezio Auditore Firenze, a luchar contra la Orden de los Templarios. Su intelecto e inventos son claves en la narrativa del juego.

Y a riesgo de que el recuento de guiños y referencias se quede corto, no puede dejar de mencionarse la asombrosa cantidad de ‘merchandising’ inspirado en la iconografía de Da Vinci. Una fuente creativa, ya libre de derechos de autor, que seguramente seguirá exprimiéndose con total justificación: no son muchos los artistas que logran convertir su obra en símbolos tan universales. Vale la pena celebrarlo.

"DA VINCI EXPERIENCE"
La muestra “Da Vinci Experience and his Real Machines”, que se exhibe en el Ministerio de Cultura, es una notable puerta de entrada a la obra del maestro italiano. Se trata de un recorrido inmersivo y multimedia dividido en tres ambientes en los que confluyen arte y tecnología.
La primera zona permite apreciar las principales obras del artista renacentista mediante proyecciones en el techo, paredes y suelo del lugar. En el segundo ambiente, hay una serie de videos e infografías sobre los inventos y diseños de Da Vinci, con varios modelos a escala real de sus asombrosas maquinarias. La tercera y última consiste en una serie de piezas audiovisuales que nos transportan a la época en que vivió el artista.
Si bien se trata de una exposición de ingreso libre, el aforo máximo es de 1.000 personas por día, que podrán acceder con un ticket asignado por orden de llegada. Por ello se recomienda acudir temprano.
"Da Vinci Experience" va hasta el 8 de enero, de martes a domingo de 10 a.m a 5 p.m. en la sala Kuélap (segundo piso) del Ministerio de Cultura (Javier Prado Este 2456, San Borja). Hoy no habrá atención por ser feriado.

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