¿Alguna vez has intentado colocar una manta grande en tu lavadora y esta terminó sonando como si fuera a despegar, interrumpiendo el ciclo de lavado? No eres el único. Muchos de nosotros hemos pasado por esta frustrante experiencia; sin embargo, hay una solución simple que podría salvar tu electrodoméstico y tu ropa.
En un video que se volvió viral, el usuario Pete (@estheticianpete) compartió un truco que transformó por completo su rutina de lavado.
“Cómo lavar tus grandes mantas sin que se pare la lavadora”, escribió el estadounidense.

Resulta que la clave está en una opción que muchos de nosotros pasamos por alto: el ciclo para artículos voluminosos.
“Hay una opción llamada artículos voluminosos y cogerá literalmente cualquier cosa, y no se detendrá”, explicó Pete. Este ciclo está diseñado específicamente para lavar prendas grandes y pesadas, como mantas, edredones y alfombras pequeñas, sin dañar la lavadora o la ropa.
No obstante, es importante recordar que no todos los artículos son aptos para la lavadora, incluso si la etiqueta indica que se pueden lavar a máquina.
Prendas delicadas como las que tienen lentejuelas, cuero o joyas, así como aquellas con relleno de espuma de memoria, deben lavarse a mano o llevarse a la tintorería.

Además, es importante no sobrecargar el aparato. Las mantas muy pesadas pueden dañar el equipo y desequilibrar el ciclo de centrifugado.
En la sección de comentarios, los usuarios advirtieron sobre las consecuencias de no seguir estas indicaciones.
“Un reparador dijo que DEBES usar esa opción para toallas, alfombras, ropa de cama, etc. De lo contrario, desgastas los tambores y luego te despides de tu lavadora”, escribió un internauta.
Cómo alargar la vida útil de una lavadora
Según TCL, es fundamental realizar un mantenimiento regular para prolongar la vida útil de una lavadora. Limpia periódicamente el dispensador de detergente y las gomas de la puerta con un paño húmedo y vinagre blanco para eliminar la acumulación de residuos y prevenir la formación de moho. Además, verifica y limpia los filtros de la lavadora de manera regular.
Asegúrate de cargar correctamente tu lavadora. Evita sobrecargarla o cargarla con prendas demasiado pesadas, ya que esto puede desequilibrar el tambor y dañar los componentes internos. También es importante nivelar la lavadora sobre una superficie firme y plana para evitar vibraciones excesivas.
Por último, utiliza los detergentes adecuados y en las cantidades recomendadas. Un exceso de detergente puede generar espuma excesiva y afectar el rendimiento de la lavadora.