Si el calentamiento antropogénico actual continúa, los lagos de todo el mundo probablemente experimentarán para 2100 un calentamiento generalizado, muy por encima de lo experimentado hasta ahora.
Es la conclusión de un nuevo estudio de un equipo internacional de limnólogos y modeladores climáticos que utilizó datos de temperatura de los lagos simulados por un modelo informático climático de última generación (Community Earth System Model, versión 2) que abarca el período de 1850 a 2100. Es el primer modelo de este tipo y captura la dinámica y la termodinámica de los sistemas lacustres de forma integrada con la atmósfera. Un artículo sobre los hallazgos se publican en Nature Geoscience.
En lugar de ejecutar el modelo informático hacia el futuro una sola vez, los científicos utilizaron un conjunto de 100 simulaciones del pasado al futuro, que se ejecutaron en uno de los ordenadores más rápidos de Corea del Sur (“Aleph” en el IBS-Institute for Basic Science). Cada simulación genera una realización ligeramente diferente de la variabilidad climática natural, al mismo tiempo que responde a los efectos del calentamiento antropogénico a partir del aumento de las concentraciones de gases de efecto invernadero.
Con este enfoque de modelado de conjuntos, los científicos pudieron separar el rango de variaciones de temperatura de los lagos que ocurren naturalmente de las causadas por la interferencia humana. Esto permitió al equipo estimar por primera vez el momento en que las temperaturas de los lagos superarán permanentemente los límites naturales, una situación conocida como condiciones sin análogos.
Climas sin análogos para el final del siglo
El Dr. Lei Huang, autor principal del estudio y ex investigador postdoctoral en el Centro de Física del Clima del IBS en Busan, Corea del Sur, enfatiza que, en promedio, los lagos en todo el mundo enfrentarán climas sin análogos para fines de este siglo. Sin embargo, el momento de la emergencia varía globalmente. Los lagos tropicales, que albergan una rica biodiversidad, serán los primeros en experimentar condiciones sin precedentes cuando el calentamiento global alcance unos 2,4 °C (por encima de las condiciones preindustriales).
Aunque el calentamiento de la superficie afecta a las especies de las capas superficiales de los lagos, algunos organismos pueden migrar verticalmente para encontrar hábitats térmicos más adecuados. Por lo tanto, es fundamental considerar también cómo penetra el calentamiento en las capas subterráneas.
“Nuestro estudio revela la aparición sincrónica de condiciones no análogas en las capas subterráneas de los lagos tropicales, impulsada por la rápida transmisión descendente de señales de calentamiento durante los frecuentes eventos de mezcla de lagos. Por el contrario, los lagos de latitudes altas protegen parcialmente las capas subterráneas del calentamiento de la superficie a través de la estratificación, retrasando o incluso a veces impidiendo los climas no análogos en las profundidades”, dice en un comunicado el Dr. Iestyn Woolway, investigador independiente en la Universidad de Bangor, autor correspondiente del estudio.
Las consecuencias de los climas no análogos de los lagos son profundas. “Pueden provocar graves perturbaciones futuras en los ecosistemas”, comenta el profesor Axel Timmermann, coautor del estudio y director del Centro de Física del Clima del IBS.
En comparación con la biota terrestre y marina, los organismos de los lagos suelen tener una capacidad limitada para migrar a hábitats climáticamente más óptimos. Por lo tanto, comprender el momento de emergencia no análogo es vital para la adaptación, la planificación y la mitigación del cambio climático en los ecosistemas lacustres.