(Foto: AP)
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Milagros Asto Sánchez

No hubo acuerdo conjunto que firmar, ni almuerzo ni foto de despedida. La esperada segunda cumbre entre el presidente de , , y el líder de , , terminó abruptamente el jueves en Vietnam, lo que cubrió de incertidumbre el tema clave de la cita: la desnuclearización del régimen de Pyongyang.

Sin embargo, el embajador de Corea del Sur en el Perú, June-Hyuck Cho, se muestra optimista y considera que la cita marcó el inicio de las negociaciones.

—¿Qué fue lo que salió mal? ¿En qué fallaron ambas partes?

La cumbre no fue un fracaso ni un éxito, es un proceso. Creo que estamos en el inicio de una negociación real. Ambos líderes pasaron muchas horas juntos, mostraron sus cartas. Ahora es momento de que mediten sobre las peticiones de cada uno, reagrupen sus estrategias y vuelvan a la mesa de negociación. No creo que hayan hecho algo mal. Cada negociación tiene altos y bajos. No puedes estar de acuerdo en todo, en un tema que es tan complejo, es un proceso de entendimiento mutuo y eso lleva tiempo.

—Trump dijo que Estados Unidos rechazó levantar todas las sanciones, mientras que Pyongyang defendió que solo pidió un levante parcial. ¿A quién le creemos?

No estuve ahí, no sé exactamente qué pasó. Es un tema muy complejo. Se trata de reciprocidad, tú renuncias a esto y tú renuncias a esto otro. Las opciones que tiene Estados Unidos se basan en las sanciones. Ellos creen que estas sanciones llevaron a Corea del Norte a la mesa de negociación. Renunciar a una parte importante de ellas es como renunciar a todo.

—¿Cuál es la posición de Corea del Sur?

Nosotros creemos fuertemente que la cumbre en sí misma es un éxito y creo que es una buena base para futuras negociaciones. Es una buena señal que Corea del Norte quiera reunirse de nuevo con Estados Unidos.

El embajador surcoreano dice que la cumbre en sí es un éxito. (Foto: El Comercio / Nancy Chappell)
El embajador surcoreano dice que la cumbre en sí es un éxito. (Foto: El Comercio / Nancy Chappell)

—Trump dijo que tal vez no se reúna con Kim en un largo tiempo. ¿Cómo ve el futuro de las negociaciones?

Trump dijo que podía ser pronto o en un largo tiempo. Solo el tiempo lo dirá.

—Pero Pyongyang ha dicho que su posición no va a cambiar...

Es lo usual que en el inicio de las negociaciones se hagan las máximas peticiones. Nosotros creemos que con el tiempo habrá un punto de encuentro entre las dos partes. Ahora la responsabilidad y la importancia del rol mediador de Corea del Sur han crecido, ciertamente hay una brecha entre ambos lados. Debemos convencer a los dos líderes para avanzar. Necesitamos paz, desnuclearización y prosperidad económica. Deberíamos ponerlos todo eso junto en una canasta, no uno por uno.

—Para muchos analistas, Kim fue el vencedor de la cumbre. Logró reunirse por segunda vez con Trump y ha atenuado la mala imagen de su régimen. ¿Qué opina usted?

Ambos líderes son ganadores porque hablaron y trataron de dar solución a este problema. En cierto sentido, Corea del Norte ha tenido éxito en la eliminación de ese tipo de imagen negativa. Es una decisión muy audaz de parte de Kim viajar a Singapur, a Vietnam, salir del reino hermético de Corea del Norte. Quién sabe si vaya a Washington la próxima vez. Es positivo que se exponga y hable con los medios extranjeros. Su padre no hizo nada.

—¿Corea del Norte representa aún una amenaza?

Es un caso muy complejo. Corea del Norte es un socio para construir la paz en la península coreana y al mismo tiempo tenemos que tomar precauciones. No puedo decir que sea aún una amenaza, pero debemos estar preparados para cualquier eventualidad porque en lo que respecta a Corea del Norte siempre hay dos caras.

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