La presidenta sumó a su gobierno a su predecesor para enfrentar las crisis que convulsionan a , pero ese cartucho podría resultar pólvora mojada tras conocerse una conversación telefónica entre ambos políticos.

En esa conversación, grabada por la policía judicial el miércoles por la mañana, Rousseff le anunciaba a Lula que se aprestaba a enviarle el decreto de su nombramiento como jefe de gabinete para que pueda "usarlo en caso de necesidad".

Esa frase alimentó la sospecha de que el ingreso de Lula al gobierno era asimismo una maniobra para dotar de fueros especiales al ex jefe de Estado, permitiéndole así escapar a la órbita de la justicia ordinaria y en especial a un eventual pedido de detención en su contra.

A continuación, el diálogo entre Dilma Rousseff y su predecesor:

- Rousseff: Hola
- Lula: Hola
- Rousseff: Lula, escúchame.
- Lula: Dime, querida. Ajá...
- Rousseff: Mira, estoy mandando a 'Bessias' con el papel para que lo tengamos, úsalo solo en caso de necesidad, que es el acta de asunción, ¿está bien?
- Lula: Ajá. Está bien, está bien.
- Rousseff: Eso, nada más, tú espéralo ahí que está yendo.
- Lula: Está bien, estoy acá, me quedo esperándolo.
- Rousseff: ¿Está bien?
- Lula: Está bien.
- Rousseff: Chau.
- Lula: Chau, querida.

- ¿Qué dice Dilma? -

La presidencia brasileña explicó que la conversación filtrada remitía a una consulta sobre la necesidad de hacerle llegar a Lula el documento de su nombramiento para que lo firmara, dado que no estaba seguro de poder asistir a la investidura.

La Presidencia anunció además que adoptará "todas las medidas judiciales y administrativas pertinentes para reparar una flagrante violación de la ley y la Constitución" por parte del juez Moro, "autor de la filtración".

Fuente: Agencias

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