Londres. Al menos 208 personas habrían muerto en la represión del movimiento de protesta que empezó en noviembre en Irán, afirmó este lunes Amnistía Internacional.
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“El número de personas que se cree murieron durante las manifestaciones en Irán que estallaron el 15 de noviembre aumentó a por lo menos 208”, indicó la organización con sede en Londres, que la semana pasada publicó un balance de 143 víctimas fatales.
Solo en la ciudad de Shahriar, en la provincia de Teherán, se registraron decenas de muertos, “una de las ciudades donde el balance [...] es de los más altos”, según Amnistía Internacional.
“Este alarmante resultado es una prueba más de que las fuerzas de seguridad iraníes emprendieron una horrible matanza”, estima Philip Luther, director de investigaciones de Amnistía Internacional para la región de Oriente Medio y del norte de África.
El balance “demuestra el desprecio total de las autoridades iraníes por la vida humana”, añade.
Las manifestaciones en Irán, algunas violentas, estallaron el 15 de noviembre tras el anuncio de un alza de los precios de la gasolina, y se extendieron rápidamente a al menos 40 ciudades y localidades.
Las protestas fueron acompañadas de incendios o ataques a estaciones de servicio, comisarías, centros comerciales, mezquitas o edificios públicos, según los medios iraníes.
Las autoridades, según las cuales este movimiento de protesta es el resultado de un “complot” urdido en el extranjero, calificaron de “exagerado” el anterior balance de Amnistía Internacional.
Estas solo confirmaron la muerte de cinco personas -cuatro miembros de las fuerzas de seguridad muertos a manos de “alborotadores” y un civil-, y anunciaron unas 500 detenciones, incluidas las de 180 “líderes”.
En su comunicado del lunes, Amnistía Internacional exhorta a la comunidad internacional a garantizar que los responsables de “esta sangrienta represión” rindan cuentas, y acusa a las autoridades iraníes de no tener ninguna “intención de realizar investigaciones independientes e imparciales”.
La ONG afirma también que familias de víctimas han sido amenazadas y han recibido como consigna no hablar a los medios de comunicación y no organizar funerales para sus allegados.
Amnistía Internacional indica que ha analizado y verificado videos que muestran que “las fuerzas de seguridad iraníes dispararon contra manifestantes no armados”.
El acceso a internet fue bloqueado en todo el país a partir del 16 de noviembre por la noche, lo que dificulta una evaluación del alcance de la represión.
Fuente: AFP