El presidente estadounidense Barack Obama advirtió hoy a Rusia del "costo" que tendría una intervención militar en la península ucraniana de Crimea.
"Cualquier violación de la soberanía e integridad territorial de Ucrania será profundamente desestabilizadora", manifestó Obama en una conferencia de prensa convocada de manera espontánea en la Casa Blanca. Además, "significaría una profunda intervención en asuntos, que deben ser decididos por los ciudadanos de Ucrania", añadió.
Obama afirmó que Estados Unidos está "profundamente preocupado" por los informes sobre movimientos militares rusos en Ucrania. La situación es "difusa" y es seguida de cerca por Washington, indicó el mandatario.
Obama reafirmó que Estados Unidos cree que Ucrania debe determinar su futuro político por su cuenta.
El vicepresidente de Estados Unidos, Joe Biden, habló por teléfono con el nuevo primer ministro de Ucrania, Arseni Yatseniuk, para garantizarle el respaldo de su país.
En Crimea, un territorio habitado mayormente por rusos, aterrizaron este viernes 13 aviones militares rusos del tipo Ilyushin Il-76 con un total de 2.000 soldados, además de 11 helicópteros Mi-24. Asimismo, fue cerrado el espacio aéreo sobre la capital de la república autónoma, Simferópol, hasta el sábado por la noche.
Ucrania acusa a Rusia de haber violado masivamente la frontera entre ambos países. Aviones de transporte, helicópteros y soldados ingresaron en la península de Crimea, dijo el embajador ucraniano ante Naciones Unidas, Yuri Sergeiev, tras la reunión del Consejo de Seguridad en Nueva York.
Por su parte, el Parlamento ucraniano instó hoy a su vecino Rusia a abstenerse de cualquier medida que ponga en peligro de unidad territorial de Ucrania