"La presencia de Dios hoy se llama también rohinya", dijo el papa Francisco en Bangladesh. (Foto: Reuters/Damir Sagolj)
"La presencia de Dios hoy se llama también rohinya", dijo el papa Francisco en Bangladesh. (Foto: Reuters/Damir Sagolj)
Redacción EC

El pronunció finalmente el término "", que había evitado durante su viaje en Birmania y Bangladesh por consejo de la iglesia local, tras un encuentro con un grupo de esta perseguida minoría musulmana en el que escuchó sus dramáticas historias.


El sumo pontífice esperó a estar en Daca, la capital de Bangladesh, para pronunciar en público la palabra "rohinya", utilizada generalmente por la comunidad internacional y repetida desde la plaza San Pedro en Roma, pero tabú en Birmania.

"La presencia de Dios hoy también se llama rohinya. Que cada uno tenga su respuesta", dijo el papa Francisco en italiano tras haber mantenido un encuentro con 16 miembros de la minoría que procedían de los campos de refugiados en la provincia bangladesí de Cox's Bazar, donde se han asentado al huir de la brutal persecución que padecen en Birmania.

El éxodo de esta minoría musulmana constituyó la línea roja del viaje del papa Francisco en Asia, iniciado el lunes en Birmania y que termina el sábado por la tarde en Bangladesh.

Al término de un encuentro interreligioso en Daca, una delegación de refugiados rohinyas formó fila para hablar unos minutos con el pontífice, que los escuchó asintiendo con la cabeza, con tristeza.

Francisco tomó sus manos, posó su palma sobre la cabeza de una niña y los escuchó ayudado de un intérprete.

El papa Francisco durante su encuentro con una niña rohingya.
 (Foto: Reuters/Damir Sagolj)
El papa Francisco durante su encuentro con una niña rohingya. (Foto: Reuters/Damir Sagolj)

El director de Caritas, James Gómez, explicó a Efe que se trataban de dos familias, un grupo de 16 personas en total, entre ellas dos mujeres y un bebé y una niña huérfana.

"Quizá podemos hacer poco por vosotros, pero vuestra tragedia tiene mucho espacio en nuestro corazón. Para aquellos que os han hecho daño y sobre todo por la indiferencia del mundo, os pido perdón. Perdón", dijo Francisco tras el encuentro.


Tabú

El papa Francisco siempre fue pugnaz desde el Vaticano sobre la suerte de los rohinyas, incluso antes de la huida masiva de más de 620.000 personas que se refugiaron en Bangladesh los últimos tres meses. Este éxodo forzado fue calificado de "limpieza étnica" por la ONU.

En Birmania, durante cuatro días, el papa pidió a los budistas que superen "todas las formas de incomprensión, de intolerancia, de prejuicio y de odio" aunque evitó mencionar directamente la situación de la minoría musulmana.

En ese país, la xenofobia y el odio a los musulmanes ganan terreno y una gran mayoría de los habitantes consideran a los rohinyas, que llaman "bengalíes", como inmigrantes ilegales que no forman parte del país.

En Daca, Francisco recalcó que el compromiso de Bangladesh a favor de la libertad religiosa debe ser "un llamado respetuoso pero firme destinado a quien busque fomentar divisiones, odio y violencia en nombre de la religión".

La llegada del sumo pontífice a Bangladesh es un acontecimiento para la pequeña comunidad de 375.000 católicos (0,24% de los 160 millones de habitantes).

Fuente: EFE/AFP

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