Tiene cáncer terminal y pide eutanasia para morir con dignidad

Miguel Carrasquillo, de solo 35 años, sufre de cáncer terminal y tiene un último pedido: que se apruebe la eutanasia para poder morir con dignidad. 

En un video divulgado por la asociación Compassion & Choices, Miguel, de origen puertorriqueño y residente en Chicago, insta a los legisladores a aprobar leyes que permitan a los adultos con enfermedades terminales la opción de recibir ayuda médica para morir.

Miguel ha soportado con valentía tratamientos terriblemente dolorosos para combatir el tumor cerebral que se le detectó en el 2012, pero este se ha extendido por todo su cuerpo. 

De acuerdo con Patricia A. González-Portillo, mánager de comunicaciones de Compassion & Choices para los hispanos, en abril del año pasado a Miguel le habían dicho que solo le quedaba un año de vida, plazo que ya se cumplió.

“Cada vez que me levanto tengo que bregar con diferentes sintomatologías: dolores de cabeza, dolores de espalda. Convulsiones… Choques eléctricos,” dijo Miguel en el video. “La persona que está sufriendo soy yo. Hay que estar en mis zapatos para que tú sientas lo que yo estoy sintiendo… Yo lo que quiero es morir de la manera en la que yo estoy buscando morir… con pastillas…”.

Para Miguel, la ayuda médica para morir no es una opción legal en el estado de Illinois, o en su natal Puerto Rico. Él pasa sus ultimos dias al cuidado de sus padres, que profesan la religión católica.

Miguel ha soportado con valentía los tratamientos para tratar de curar el tumor que lo invade. Aminora sus dolores de cabeza a través de una bolsa de morfina conectada a su nervio ciático. Debido a que los dolores son cada vez más fuertes e insoportables, ha pedido que le suban las dosis.

“Yo le pido a Dios que esto acabe ya”, dice Miguel en el video. ”Mira, no es que yo esté dándome por vencido, es que yo estoy cansado de luchar, cansado de vivir de cómo estoy viviendo”.

Actualmente, solo cinco estados de Estados Unidos autorizan la ayuda médica para morir: Oregon, Washington, Montana, Vermont y California, donde la nueva ley entrará el efecto el 9 de junio.

“La trágica experiencia de Miguel ilustra claramente la necesidad urgente de crear opciones al final de la vida en todas las comunidades de nuestro país,” dijo Barbara Lee, presidenta de Compassion & Choices, una abogada que coescribió la ley de Oregon que permite la ayuda médica para morir. “Las muertes dolorosas no conocen fronteras. No respetan grupos étnicos ni religiones”.

Miguel espera que su historia ayude a persuadir a que los legisladores de todos los estados de Estados Unidos autoricen la ayuda médica para morir como una opción al final de la vida.

“Senadores, les pido que por favor escuchen mi petición, que es morir con una dosis de pastillas, como Brittany Maynard lo hizo en Oregón,” señaló. “Ya estamos cansados, cansados de seguir luchando día tras día. Solamente escuchen, escuchen”.

Nilsa Centeno, la madre de Miguel, no se imagina perder a su único hijo, el mayor. Pero dice que es peor verlo morir lentamente con dolores insoportables.

Miguel y su madre Nilsa Centeno (Compassion & Choices)

“Lo he visto sufrir, lo he visto llorar, lo he visto caerse, desplomarse” dice Centeno en el video. “Se trata de la dignidad del ser humano y en este caso es mi hijo. Y esa dignidad hay que respetarse hasta el último momento”.

Miguel, que es chef, tambien espera que los latinos hagan a un lado el tabú cultural de no hablar sobre la muerte y la ayuda médica para morir.

"Antes de partir, yo quería conocer a mi sobrino... Ya he cumplido ese deseo. Ya conocí a mi sobrino. Se llama Miguel Andrés. Ya yo estoy listo para morir”, manifiesta Miguel.