Ecuador. Grupos de estudiantes universitarios se sumaron este martes a la protesta indefinida contra la política económica del Gobierno convocada por el movimiento indígena, movilización que ha subido de tono tras la detención de su líder Leonidas Iza.
Enfrentamientos entre manifestantes y agentes en varias carreras del país, especialmente en la ciudad andina de Latacunga, así como el ataque de estudiantes contra una patrulla policial en un sector del centro-norte de Quito, marcaron esta segunda jornada que se inició con la detención de Iza en la madrugada.
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Integrantes de la Federación de Estudiantes Universitarios del Ecuador y de otros colectivos sociales efectuaron esta tarde una marcha en Quito, donde sumaron la liberación inmediata de Iza al pliego de diez peticiones de la Confederación de Nacionalidades Indígenas.
Entre los reclamos se incluyen la congelación del precio de las gasolinas, el control de los precios de los productos de consumo masivo y la oposición a un plan de privatizaciones, todas ellas ligadas, según los manifestantes, a las imposiciones del Fondo Monetario Internacional (FMI).
Durante la marcha, cerca de un edificio donde funciona la Unidad de Flagrancia de la Fiscalía, varios jóvenes, con los rostros cubiertos, golpearon con palos y piedras una patrulla que se encontraba en el lugar, la pintaron de colores y al final se registró un incendio en el interior del vehículo, que fue sofocado por policías que dispersaron a los manifestantes.
Varios estudiantes fueron detenidos en la manifestación por agentes vestidos de paisanos que caminaban confundidos entre los manifestantes, en un momento en que varias motocicletas de la policía se acercaron para diluir la concentración.
Asimismo, en redes sociales se difundieron videos con la llegada a Quito de camiones con manifestantes indígenas, que se apostaron en el sur de la ciudad.
Uno de los focos de la protesta se concentró en la ciudad de Latacunga, a unos 90 kilómetros al sur de Quito, donde se debían realizar diligencias por la detención de Iza, el presidente de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie), la organización social más importante del país.
En esa ciudad, miles de campesinos se concentraron para exigir la inmediata liberación de Iza, por considerar que su detención fue arbitraria e ilegal, y porque se habrían, supuestamente, violado normas del debido proceso.
El Gobierno del presidente conservador, Guillermo Lasso, ha justificado la detención de varios dirigentes al considerar que son autores intelectuales de hechos violentos como el incendio de patrullas y la supuesta paralización de pozos de extracción de crudo en la Amazonía.
Lasso, no obstante, ha manifestado su disposición a dialogar con los opositores, aunque ha dicho que no tolerará que se alteren los servicios públicos en el país, en un momento en que Ecuador intenta reactivar su economía agravada por la pandemia de la covid-19.
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