El cruel feminicidio de la niña Fátima, de tan solo 7 años, viene causando gran indignación en todo México. Aunque las autoridades han detenido a los presuntos responsables, Gladis Giovana Cruz Hernández y Mario Alberto Reyes Nájera, todavía quedan muchas preguntas por resolver. Además, este caso ha desatado una gran preocupación en los padres de familia por la seguridad en las escuelas de Ciudad de México.
Como se recuerda, Fátima Aldrighett fue secuestrada a la salida de la Escuela Primaria Enrique C. Rebsamen, ubicada en el barrio Santiago Tulyehualco, en el sur de la Ciudad de México. Luego fue violada, asesinada y dejada en una bolsa de plástico.
► Fátima: Así fue la detención de la presunta pareja feminicida de la niña de 7 años en México
► Autoridades mexicanas capturan a los presuntos feminicidas de la niña Fátima
La Fiscalía indicó que cuando la madre de Fátima llegó para recogerla, una mujer, que sería Gladis Giovana Cruz Hernández, ya se la había llevado.
Un detalle poco conocido es que la Ciudad de México cuenta con una guía de operatividad de las escuelas. Este documento tiene un protocolo específico que indica cómo debe realizarse la entrega de los niños a sus padres al momento de la salida.
El nombre formal del documento es “Guía Operativa para la Organización y Funcionamiento de los Servicios de Educación Inicial, Básica, Especial y para Adultos de Escuelas Públicas en la Ciudad de México. 2018-2019”. Sus puntos son bastante claros.
Según el documento, las personas autorizadas de recoger a los niños deben contar con una credencial que los identifique como tales.
“Por ningún motivo se entregarán los infantes a personas menores de edad, así como a padres, madres de familia o tutores y /o familiares en estado inconveniente (alcoholizados, drogados, etc.). En caso de extravío de credencial se deberá solicitar la reposición por escrito especificando el motivo”, dice la norma.
Además, la norma dice que hay una tolerancia 20 minutos para que el menor sea recogido. Si es que no llega uno de los padres, será llevado a una agencia del Ministerio Público especializada en niños y adolescentes.
“De no presentarse al término de la jornada escolar correspondiente para recoger al alumno, de acuerdo con los horarios establecidos y teniendo como tolerancia veinte minutos antes, se solicitará el apoyo a las autoridades correspondientes para que los alumnos sean trasladados por el Director del plantel educativo o personal autorizado a la Agencia 5982”.
Luis Humberto Fernández Fuentes, titular de la Autoridad Educativa Federal en la Ciudad de México (AEFCM), dijo que vienen adelantando una investigación para determinar si la escuela cumplió con el mencionado protocolo.
Fernández indicó a CNN que habló “con el director de la escuela y con el maestro que hizo la entrega y estamos tomando todos los detalles y hay que señalar que tanto el maestro como el director están disponibles y están colaborando con la investigación penal, y también hemos abierto desde el principio una investigación administrativa”.
El director de la Escuela Primaria Enrique C. Rebsamen, Telésforo Rosas, aseguró que en ningún momento Fátima fue entregada a Gladis Giovana Cruz Hernández. En declaraciones a Excelsior aseguró que la menor salió sin que nadie la recogiera.
Por su parte, la fiscal General de Justicia, Ernestina Godoy, aseguró que fueron los maestros de la escuela quienes entregaron a Fátima a una mujer que se la llevó porque “ya la conocía”.
Los detenidos Gladis Giovana Cruz Hernández y Mario Alberto Reyes Najera revelaron los terribles detalles del crimen.
Gladis Giovana aseguró que llevó a Fátima donde Mario porque le había pedido una “novia joven”.
Este caso no solo ha generado reacciones en México. Padres de diferentes países, entre ellos Perú, se muestran preocupados por la seguridad de sus hijos en el colegio.
El documento oficial de la Ugel 2 de Lima, cuyo nombre es “Orientaciones para gestionar las condiciones del servicio educativo en las instituciones públicas y privadas durante el año escolar 2019”, también aborda la seguridad en la salida de los colegios.
El mencionado documento recomienda a los colegios coordinar con las BAPES (Brigadas de Autoprotección Escolar), Serenazgo, Policía y otros aliados estratégicos para garantizar el orden y seguridad durante el ingreso y salida de la institución educativa.
También sugiere delegar responsables para el control y cuidado tanto al ingreso, recreos y salida de los estudiantes. “Esta acción no exime la responsabilidad del docente de aula de inicial y primaria quien es responsable del menor hasta la entrega a sus padres o apoderados”, aclara.