Claudia Chiroque

No confundamos las cosas, criticar a una unidad de investigación por sus formas o por su ritmo en el avance de una investigación ha sido y seguirá siendo nuestra obligación, pero de ahí a desconocer a la como parte importante en la desarticulación de organizaciones criminales es un error, porque revela la incomodidad del poder de turno, que sin rubor alguno pretende ahora mismo desactivarla y anexarla a la . El encargado de cumplirle el capricho y colaborar con lo que más parece una venganza de es el

La pataleta tiene dos elementos: el primero sin duda es el protagonismo del agente al frente de esta investigación y el segundo es haber puesto al descubierto varias de las versiones cínicas de la presidenta sobre los Vamos a refrescar la memoria, estimado lector, el contexto es importante y las conclusiones que usted saque, también.

Todo comenzó el 29 de marzo, cuando la Diviac al mando de Colchado y con una orden judicial bien sustentada allanó la casa de la señora Boluarte en Allí hallaron un certificado de garantía y autenticidad de uno de los Rolex adquirido en la en julio del 2023, lo que obligó a la presidenta a ensayar otra explicación. Pasamos del “fruto de mi esfuerzo” a “fue un préstamo de mi ‘wayki’ ”. Este último, gobernador regional de

Saltaron a la vista entonces los delitos de cohecho, enriquecimiento ilícito y omisión de consignar información en su declaración jurada. Desde ese día, parece que el único objetivo fue buscar revancha contra Colchado.

Hace mal el ministro Santiváñez reduciendo la funcionalidad de la Diviac a una sola persona. Esta división es más que Colchado (hoy separado de esta unidad). Y no solo eso: esta unidad no solo investiga a Dina Boluarte; desactivarla también es afectar otras investigaciones pendientes como la de o la de . Sin embargo, no es su único error; usar argumentos falsos y tendenciosos también lo es Santiváñez ha hecho alusión a un presupuesto de S/72 millones en un período de cinco años destinado a la Diviac cuyo destino serían “operaciones sospechosas” y sin resultados.

En otras palabras, la Diviac sería corrupta e ineficiente. Asimismo, el ministro ya convocó a la contraloría para realizar una auditoría general sobre los fondos de esta división. Y, atención a esto, hace un par de días fue promulgada la ley que le permite justamente a ser contralor por tiempo indefinido. ¿A cambio de qué? No quisiera pensar que esta es la oportunidad para “devolver el favor”.

Santiváñez no está solo. En la cola, aprovechando el momento, está una vez más el Ya salió la congresista a pedir facultades investigadoras para la A perder tiempo y gastar recursos para realmente politizar el tema.

¿A qué costo quiere mantenerse en el cargo el señor Juan José Santiváñez? Coincido con Christian Hudtwalcker en que parecen suficientes el ‘espíritu de franela’ y la mediocridad para acompañar al Gobierno.

Le quiero recordar al señor Santiváñez tres cosas: la primera es que será un ave de paso más de este ministerio, la segunda es el costo de su plan (porque al irse afrontará una investigación por abuso de poder y obstrucción de la justicia) y la tercera es el daño que pagaremos, una vez más, todos los peruanos.

*El Comercio abre sus páginas al intercambio de ideas y reflexiones. En este marco plural, el Diario no necesariamente coincide con las opiniones de los articulistas que las firman, aunque siempre las respeta.

Claudia Chiroque es Periodista y abogada