El miércoles, el aeropuerto Jorge Chávez anunció la reapertura de vuelos nacionales. Esta medida se comunicó junto con una serie de protocolos que velaban por el viajero, e involucraban los espacios del aeropuerto y la seguridad de los operadores del recinto. Además, Lima Airport Partners (LAP) publicó un spot informativo utilizando un lenguaje que apelaba a la emotividad y que invitaba a los viajeros a transitar por las instalaciones del Jorge Chávez cumpliendo con las medidas de seguridad.
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El día de la reapertura, sin embargo, las fotografías que circulaban en las redes sociales daban cuenta del caos que se había generado y de la distancia enorme entre lo que anunciaba LAP y la realidad. Estas imágenes mostraban un centenar de pasajeros aglomerados en las puertas de acceso al interior del aeropuerto. Sin duda, esto nos lleva a cuestionar la capacidad de organización y de seguridad que ofrecen los servicios de transporte aéreo. De igual manera, nos muestra cómo se están tomando las medidas de reactivación del turismo en el país.
Según la OMT, en abril se reportó una caída en el sector turismo a nivel mundial de un 97% en el número de llegadas internacionales. Javier Prialé afirma que el turismo en nuestro país es fuente de ingresos para 1,4 millones de personas, y que las tres actividades que concentran el 62% de turismo son el transporte, los restaurantes y los alojamientos.
No es una sorpresa que el Perú haya sufrido un golpe muy duro en este sector debido al COVID-19. No obstante, si pensamos en la reactivación, debemos mirar a países como España, que ha tomando medidas drásticas en la recuperación del turismo con estrategias de comunicación poderosas.
Una de las medidas más importantes es la creación del aplicativo “Spain Travel Health”, a través del cual el pasajero completa un formulario y recibe un código QR para presentar en los controles sanitarios. Por otro lado, las campañas de comunicación se han concentrado en el turismo interno. Se han identificado cambios en el comportamiento del turista relacionados con la confianza y la seguridad. Así, lo primero que busca el turista español es seguridad. Debe saber que tiene acceso a cualquier centro de salud en el que será atendido inmediatamente. Junto a esto, debe sentir confianza en el destino. Esto implica que podría, eventualmente y con todas las garantías para hacerlo, cambiar sus planes de viaje en cualquier momento.
Para recuperar la confianza, los especialistas sugieren que la clave está en la flexibilidad; es decir, en ofrecer servicios turísticos que cumplan con las medidas de seguridad, desde la contratación de guías turísticos hasta la de las aerolíneas. Algunas compañías aéreas en España ya están ofreciendo flexibilidad en sus pasajes hasta por dos años.
Otro punto importante sobre el nuevo comportamiento del turista es la elección de destinos que ofrezcan espacios abiertos. En ese aspecto, el Perú tiene una alta oferta: Chachapoyas, Nasca, Kuélap.
¿Cómo puede el Perú, entonces, reactivar este sector sin poner en riesgo la salud de los ciudadanos? Es fundamental la importancia de las nuevas estrategias de comunicación que deben involucrar, no solo a los actores, sino a nosotros, los turistas. Hablar de un ‘nosotros’ y no del ‘otro’. En ese sentido, según Anat Shenker (OMS), es primordial que se le dé más importancia a los mensajes que emiten estas empresas, pues la narrativa utilizada en estas nuevas campañas es clave y debe estar anclada en objetivos comunes y acción colectiva.
Estos mensajes claros y nada alarmantes deben ser precisos en expresar la gravedad del momento pero también en brindar esperanza. En otras palabras, que realmente existen soluciones cimentadas en la confianza y la seguridad. Por ejemplo, presentar una guía de servicios de información y protección de nuestra salud, así como el continuo contacto entre el gobierno local y los gobiernos regionales para involucrarlos en este trabajo.
A días de celebrar las Fiestas Patrias, nos encontraremos nuevamente con esta alta demanda en el transporte aéreo y es deber del aeropuerto Jorge Chávez, así como de las aerolíneas y los servicios turísticos, cumplir con los protocolos establecidos: no solo ofrecer seguridad y confianza, sino también cumplir con la promesa para todos los viajeros.
(*) Inés Ruiz Alvarado es Directora de la carrera de Turismo Sostenible y Hotelería en la Universidad Científica del Sur.