En su mensaje a la nación, la presidenta Dina Boluarte mostró las palmas de las manos. Con eso quiso reforzar sus líneas: “con las manos limpias, sin corrupción”.
Boluarte se jacta de haber impulsado la recuperación económica. La economía, sin embargo, ha crecido, a pesar del Gobierno.
La estabilidad y el crecimiento de la economía dependen de la estabilidad política y de las políticas económicas. La estabilidad política de este gobierno depende de su relación con el Congreso.
La relación de estos poderes del Estado está basada en el pacto de la presidenta con grupos de congresistas. Esos congresistas han adquirido una patente de corso para legislar sin responsabilidad fiscal y sin responsabilidad penal.
Los mochasueldos y los que tienen investigaciones fiscales están protegidos. La irresponsabilidad es tal, que ahora se investiga una posible red de prostitución dirigida desde el Congreso.
No oiremos una palabra de la presidenta Boluarte contra el Congreso. No oiremos una palabra de ella contra las leyes desfinanciadas, populistas y deficitarias.
Los poderes del Estado se deberían fiscalizar mutuamente. Es parte del balance de poderes. En el Perú no hay balance, sino pacto; entendimiento para la impunidad.
La presidenta Boluarte muestra las palmas, pero no muestra los relojes Rolex, los aretes y pulseras de lujo. Premia, en otro caso, a su escolta, Ruth Ligarda, con un puesto en España. Ella es testigo en el caso del ‘cofre’ presidencial.
La mandataria no quiere decir a quién visitó en la playa ni por qué. Muestra las palmas de la mano como una infantil (y vacía) retórica gestual.
No dice nada sobre su rinoplastia. Trata de ocultar que en su agenda no hubo actividades oficiales en los 12 días después de la intervención.
Con esa opacidad, Boluarte se pone en manos del Congreso. Es el Congreso de 67 congresistas con investigaciones fiscales por 729 delitos. El Congreso de ‘Los Niños’, que negociaban con Pedro Castillo, y de los que negociaban con la exfiscal de la Nación Patricia Benavides.
La estabilidad de la presidenta depende de la estabilidad de esta corrupción. Van en paralelo. Ese terreno atenta contra la estabilidad de mediano plazo de la política y de la economía.
Por eso hay déficit. Por eso hay una amenaza sobre nuestro crecimiento y nuestra estabilidad monetaria. Nuestro futuro no está vinculado a una ceremonia del APEC, sino a los pactos en las altas esferas del poder.