Es un obvio derivado de llave, voz que proviene del latín clavis, a su vez relacionado con clave. Significa en el español general ‘persona que tiene a su cargo las llaves de un lugar’ y ‘utensilio en que se llevan las llaves’ (DRAE 2014). Parece exclusiva del castellano del Perú la acepción de llavero aplicada a la persona que tiene por oficio hacer copias de llaves y arreglar cerraduras. Según el Diccionario de peruanismos de la Academia Peruana de la Lengua (2016), llavero también designa en la zona andina a la persona que representa a San Pedro en las festividades de Semana Santa.
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